Dos exposiciones son producidas con fondos del Museo y las otras dos son del Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana. El director del Museo de Bellas Artes de València, Pablo González Tornel, ha desgranado los detalles de las cuatro exposiciones que se mostrarán en el centro de arte en 2022.
La primera muestra (24 de febrero – 29 de mayo) está dedicada a José Aparicio Inglada (Alicante 1770 – Madrid 1838), artista del que nunca se ha realizado una exposición individual. Completó su formación artística en París donde coincidió con el maestro neoclásico Jacques Louis David y el pintor romántico Jean-Auguste-Dominique Ingres. A su vuelta a España fue nombrado pintor de cámara de Fernando VII.
La propuesta expositiva recupera al artista alicantino más importante de las primeras décadas del siglo XIX partiendo de una importante selección de dibujos, grabados, fotografías antiguas y documentos localizados en grandes instituciones para descubrir las obras que integran su biografía artística y resaltar el contexto en el que se crearon. Está producida por el Consorci de Museus y comisionada por Pilar Tébar, historiadora del arte y directora cultural del Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert.
Del 16 de junio al 11 de septiembre se propone un viaje al diseño preindustrial e industrial con las flores aplicadas a tejidos, que en la Comunitat Valenciana está ligado a la industria sedera.
Las flores surgen en el género del bodegón y las naturalezas muertas del siglo XVII, pero no fue hasta el siglo siguiente cuando, a través de la Escuela de Flores y Ornatos, se institucionalizó la estrecha relación entre el arte y el diseño textil. El Museo de Bellas Artes ha querido hacer esta exposición de ‘Diseño, sedas y flores’ coincidiendo con la capitalidad mundial del diseño y el comisario es el director del Museo, Pablo González Tornel.
Durante el verano (30 de junio – 18 de septiembre) ‘Hacia poéticas de género’ descubre la presencia de la mujer en el arte producido entre 1804-1939 en España. En esta exposición se refleja el largo proceso de las mujeres hasta que han formado parte de la estructura modal de la cultura artística, desembocando en manifestaciones plásticas y conceptuales con una identidad manifiesta. Los profesores universitarios Concha Lomba, Jaime Brihuega, Rafael Gil y Magdalena Illán son los comisarios de esta muestra producida por el Consorci de Museus.
Para cerrar el año (20 de octubre – 5 de febrero) se ha programado ‘Ánima. Pintar el rostro y el alma’ sobre el valor del retrato durante la Edad Moderna desde la perspectiva de ser retratado como deseo de no desvanecerse con la muerte.
El director del Museo y comisario ha diseñado una introducción reflexiva y seis secciones delimitadas por los epígrafes: cuerpo y alma; pasado y futuro; comunidad e individuo; nosotras y el recuerdo; muerte y olvido; y fama y memoria con los que demuestra como el retrato, mediante la fijación de lo efímero, ha pretendido vencer el olvido.