El presidente de la Comisión de Hacienda, Xus Madrigal, entrega a los grupos municipales un primer avance de las cuentas, de 47,7 millones de euros, marcadas por un carácter “prudente y responsable”
Vila-real tendrá en 2021 un presupuesto de 47,7 millones de euros, prácticamente idéntico al del ejercicio vigente en cuanto a cifras globales, con la salvedad que deberán incorporarse 500.000 euros para las primeras amortizaciones de los préstamos firmados en 2018 para hacer frente a pagos urbanísticos “heredados” de los gobiernos del Partido Popular. El teniente de alcalde y presidente de la Comisión Informativa de Hacienda, Xus Madrigal, ha entregado hoy un primer avance del presupuesto municipal de 2021 a los diferentes grupos con representación en el consistorio, con el objetivo de que los partidos puedan estudiar los datos preliminares y avanzar en la tramitación de unas cuentas que el ejecutivo local trabaja por aprobar antes de que finalice el año.
“Después de muchas dificultades por cuadrar los números, tenemos ya un primer avance que ponemos de manera oficiosa -a falta de los informes de Intervención- a disposición de los grupos municipales para que puedan también aportar las cuestiones que consideren”, valora Madrigal, quien puntualiza, en todo caso, que las cuentas de 2021, a diferencia de lo que se está viendo en municipios vecinos, no serán expansivas sino “responsables y prudentes”. “El presupuesto municipal del año que viene no crece y se mantiene prácticamente igual que el del 2020, sólo incrementado por las amortizaciones de los préstamos que tuvimos que sacar en 2018 para hacer frente al pago del convenio con las dominicas y resoluciones urbanísticas relacionadas con expropiaciones del Partido Popular en obras como el jardín del rey Jaume I, el José Soriano o el jardín Botànic Calduch”, recuerda el concejal. En concreto, el presupuesto de 2021 será de 47,7 millones de euros, apenas 523.653 euros más -los correspondientes a las amortizaciones de préstamo de 2018- que los del 2020 (47.165.000 euros).
“En definitiva, un presupuesto prudente y responsable, atendiendo a las particulares circunstancias que atraviesa Vila-real, con endeudamiento heredado de 509 euros por habitante frente a otros municipios como Castellón (135 euros), Onda (75 euros) o incluso Oropesa o Benicàssim, con deuda cero”. “A diferencia de estas poblaciones, en Vila-real el Partido Popular firmó en 2010 un préstamo de 20 millones de euros que disparó el endeudamiento municipal, desde los apenas 50 euros por habitante que había en 2009 hasta los 420 euros. Posteriormente, también nosotros tuvimos que incrementar un poco esta deuda, por los continuos pagos de la herencia urbanística del PP que suman ya 29 millones de euros acumulados”, agrega Madrigal.
Ante estas circunstancias, el presupuesto de 2021 no prevé “ni un euro más” que el del actual ejercicio “más que para amortizar los préstamos que tuvimos que sacar en 2018, con dos años de carencia, para hacer frente a los pagos urbanísticos heredados del Partido Popular, en expropiaciones y para cumplir con el convenio del convento de las dominicas”, incide Madrigal. La idea del equipo de gobierno municipal es poder aprobar las cuentas, con las que garantizar la prestación de todos los servicios municipales en las mejores condiciones, antes de finalizar el año.