Benlloch subraya que "ya no hay marcha atrás en la nueva comisaría" y también aboga por un nuevo juzgado de violencia de género.
El alcalde de Vila-real (Castellón), José Benlloch, ha participado en la mañana del miércoles en el acto oficial con motivo del Día de la Policía Nacional, la festividad de los Santos Ángeles Custodios, que se ha celebrado en el Termet de la Mare de Déu de Gràcia.
Benlloch, acompañado por el inspector jefe de la comisaría de Vila-real, Pedro Ortín, efectivos de la Policía Nacional, concejales y concejalas de la corporación, y otras autoridades, ha destacado la gran labor de este cuerpo policial en Vila-real y, sobre todo, el valor de los 105 hombres y mujeres que forman parte de la plantilla en la ciudad.
El alcalde ha subrayado,
Tenemos el mejor contenido, pero como siempre hemos reivindicado, nos falta un continente digno.
En este sentido, ha señalado que el camino hacia la construcción de una nueva comisaría «ya ha comenzado y no hay marcha atrás para tener la primera comisaría digna de la Policía Nacional en los 45 años que lleváis aquí en Vila-real». Asimismo, ha agradecido el compromiso del Gobierno central, que ya ha licitado la redacción del proyecto y tiene asignación presupuestaria prevista.
Además, el alcalde también ha aprovechado el acto para reivindicar al Gobierno central un nuevo juzgado de violencia de género en Vila-real, dado que el actual está colapsado. Benlloch ha anunciado una reunión con la jueza decana del Palacio de Justicia y una importante movilización para conseguir este juzgado.
Porque de nada sirve el trabajo de nuestra Policía Nacional, nuestros ángeles de la guarda, en la lucha contra la lacra de la violencia de género si luego la cadena se rompe cuando llega al juzgado porque no hay suficientes recursos.
En el acto, en el que también se ha recordado la figura de mossén Guillermo Sanchis, Hijo Adoptivo de Vila-real que ha fallecido este miércoles, se han otorgado las siguientes distinciones:
A los agentes Ignacio Guerrero, Diego Ubé y Verónica Romero, con la Cruz al Mérito Policial con Distintivo Blanco; a Gema Ferreres, responsable de la Oficina de Asistencia a la Víctima de los Juzgados de Vila-real; al oficial Julián Ruiz, por sus 20 años de servicio, y al subinspector Justo del Pino, a título póstumo, recogiendo la distinción su hijo José Luis del Pino. El alcalde ha felicitado a los galardonados y les ha agradecido su labor.