Avala el 'no' de Guardiola a Vox y culpa al equipo de Abascal de "rectificar" las negociaciones autonómicas.
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha respaldado públicamente este miércoles el rechazo de la candidata del PP a la Presidencia de Extremadura, María Guardiola, hacia Vox. Según Feijóo, es «desproporcionado» que Vox pretenda formar parte del Gobierno autonómico con tan solo cinco diputados. Además, ha criticado la intromisión de los cargos nacionales en las conversaciones entre los dirigentes autonómicos, calificándola como una «invasión» que él no comparte, haciendo referencia al equipo de Santiago Abascal.
Creo que el PP es un partido con principios y no se va a mimetizar con las políticas de Pedro Sánchez. Cuando decimos que algo es desproporcionado y va en contra de los votos obtenidos en las urnas, lo cumplimos.
Proclamó Feijóo en un acto junto a la fundación del PP ‘Reformismo21’.
Estas declaraciones se producen un día después de que se evidenciara la ruptura entre el PP y Vox en Extremadura, y la presidencia de la Asamblea Autonómica haya vuelto a caer en manos del partido socialista, lo que acerca a la región a nuevas elecciones.
Feijóo aseguró a los medios de comunicación que no está de acuerdo con que los líderes nacionales de los partidos puedan «cambiar conversaciones o negociaciones preliminares» que se estaban llevando a cabo en el ámbito autonómico.
No comparto que los dirigentes nacionales vengan a rectificar, total o parcialmente, las conversaciones que estaban teniendo lugar con los dirigentes autonómicos.
Aseveró, refiriéndose a la cúpula nacional de Vox.
El líder del PP enfatizó que son los líderes elegidos los que deben «asumir el protagonismo de las conversaciones para la formación de las mesas de los Parlamentos y los Gobiernos». Sin embargo,
Abascal acusó al líder del PP de sacrificar Extremadura y Murcia por sus intereses personales.
Además, Feijóo ha dejado claro que los resultados «no han sido iguales en todas las CCAA» y, por lo tanto, «no es lo mismo» el resultado de la Comunidad Valenciana, donde el PP y Vox han llegado a un acuerdo, que el de Extremadura.
Según explicó, en Extremadura, Vox solo obtuvo el 8% de los votos y 5 diputados, en comparación con los 28 diputados del PP. «Es el resultado más modesto de Vox en todas las CCAA», agregó, mientras que el PP de Extremadura «obtuvo casi el 39% de los votos».
Dado ese resultado de Vox, el líder de la oposición señaló que «no es razonable» que pretenda presidir la Asamblea de Extremadura, tener «más representantes» que el PP en el Parlamento regional y formar parte del Gobierno autonómico con varias consejerías.
Esto es desproporcionado y no responde al resultado electoral.
DEFIENDE TANTO LA ACTUACIÓN EN LA COMUNITAT COMO EN EXTREMADURA
Tras asegurar que el PP «tiene principios» y «no va a mimetizarse con las políticas de Pedro Sánchez», Feijóo ha indicado que si Guardiola ha «entendido» que la petición de Vox es «desproporcionada», el PP va a seguir «trabajando» con sus principios.
«Y por eso se ha optado de forma correcta tanto en Valencia como en Extremadura», ha apostillado, para declarar que en la primera autonomía Vox tiene el 12% de los votos y, por tanto, los resultados son «totalmente distintos» entre una y otra autonomía.
«SIN VIOLENTAR LOS CONSENSOS MAYORITARIOS»
Por ello, Feijóo ha insistido en que es «desproporcionado» que en Extremadura, con cinco diputados y el 8% de los votos, Vox pretenda presidir la Asamblea y formar parte del Gobierno con varias consejerías. «No responde al resultado electoral«, ha enfatizado.
El líder de los Populares ha hecho hincapié en que los acuerdos entre las CCAA «se cierren entre los representantes de los partidos» en esas autonomías, de forma que «no haya invasión de cargos nacionales de ningún partido para dejar sin efecto las conversaciones que han mantenido los representantes de esos partidos en las CCAA».
Previamente, en su intervención ante los miembros de la fundación ‘Reformismo21’, Feijóo ha lanzado una alusión velada a Vox al asegurar que para un demócrata cualquier minoría es respetable, pero «no a cambio de violentar los consensos sociales mayoritarios».