El servicio de Guardería Rural del Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares concluye el censo de aviones comunes del molino del Termet.
La principal colonia de esta especie de ave insectívora, protegida por la ley, se sitúa en la edificación histórica del rincón fluvial.
El Servicio de Guardería Rural del Consorcio gestor del Paisaje Protegido de la Desembocadura del río Mijares formado por los municipios de Vila-real, Almassora, Burriana, la Diputación de Castellón y la Generalitat Valenciana concluye por tercer año sucesivo el censo de la colonia de aviones comunes (Delinchon urbicum) situada en el molino de la ermita de la Virgen de Gracia de Vila-real.
En el censo se ha podido comprobar la ocupación treinta y siete nidos de un total de noventa y cinco enteros, en el año dos mil veintiuno se ocuparon veintinueve de cien y en dos mil veinte fueron dieciocho de un total de sesenta y nueve nidos enteros. Por el momento este censo está confirmando un incremento paulatino de la colonia del Termet que tiene que comprobar a lo largo de los próximos años.
El Servicio de Guardería Rural del Consorcio río Mijares prosigue la metodología del «Proyecto Golondrinas» que es una iniciativa del Instituto Catalán de Ornitología (ICO). Los censos se efectúan con unidades de muestreo que combinan cuadrados de doscientos x doscientos metros para delimitar el área precisa de la zona que se contabiliza. Los censos se efectúan a la primera hora de la mañana o al final de la tarde entre el 1 de mayo y el treinta y uno de julio.
Para efectuar el seguimiento de una forma más fácil se divide la edificación del molino del Termet en 3 partes: la testera principal y entrada al restaurante, la testera derecha y la izquierda.
Después cada una de las partes donde los aviones edifican los nidos se han dividido en cuadros bien distinguidos para efectuar el censo. El censo del Consorcio río Mijares se centra en contar los nidos que están en plena construcción o que se hallan en suficientes condiciones para ser ocupados por esta especie migradora, mas asimismo se anotan los nidos rotos y los ocupados por otras especies como son generalmente los gorriones.
800 insectos al día y unos veinte kilos al año
La presencia de los nidos de los aviones comunes en las construcciones de pueblos y urbes comporta considerablemente más beneficios que perjuicios relacionados con la suciedad que pueden causar, ya que estas aves dismuyen sensiblemente la cantidad de insectos de forma natural, llegando a comer día a día unos ochocientos insectos y al año unos veinte kilogramos. El avión común es similar a una golondrina, aunque un poco más pequeño, compacto y con el carpón blanco. Es de color negro azulado y refulgente por la parte de arriba y blanco por la de abajo.
En contraste a la golondrina común tiene la cola más corta y asimismo de horquilla. Su vuelo es veloz y diligente y desde antiguamente cría en construcciones humanas, en el campo, en pueblos mas asimismo en grandes urbes. Es una especie muy gregaria que cría en colonias y fabrica los nidos con bolas de barro pegadas a las edificaciones. Su nido está todo cerrado menos un agujero de entrada, al tiempo que el de la golondrina es como una taza abierta por arriba.
Se trata de una especie migratoria y estival que llega a nuestros pueblos y urbes en primavera y abandona la península Ibérica cara finales del verano o comienzos del otoño. Si bien desde hace años se está generando una invernada en el sudoeste de España conforme la Sociedad De España de Ornitología, SEO-Birdlife. Cada ejemplar de avión común es capaz de apresar todos y cada uno de los días cientos y cientos de moscas, mosquitos, pulgones, coleópteros, mariposas y otros insectos. Su tarea de supresión y control de insectos molestos y perjudiciales para las personas es muy importante, por consiguiente, respetar las colonias de cría de estas aves servirá para hacer un control natural de las plagas que poco a poco más afectan a la actividad social y familiar de las personas.
Nidos protegidos por la ley
La Ley 42/2007 sobre el Patrimonio Natural y la Biodiversidad establece para toda la fauna que como norma está prohibido dañar, apresar e inclusive incordiar o intranquilizar de forma intencionada a los animales silvestres, cualquiera que sea la temporada del año. Esta prohibición incluye asimismo los nidos. Los aviones comunes, golondrinas, vencejos y otras aves son parte del patrimonio natural, son aves silvestres y además de esto están absolutamente protegidas por una ley que en especial prohíbe la destrucción o el deterioro de sus nidos.
