La fiscal solicita además una multa de 3.600 euros y la inhabilitación del acusado durante siete años para ejercer profesiones u oficios educativos, en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre así como que se prohíba al acusado acceder a la red social Facebook durante 5 años.
La Fiscalía Provincial de Valencia ha solicitado una pena de tres años y medio de prisión para un hombre acusado de incitar al odio contra inmigrantes a través de las redes sociales. En sus comentarios, llegó a afirmar,
He visto 20 negros sin collar ni chip.
Según la calificación fiscal, la fiscal Susana Gisbert atribuye al hombre un delito cometido en relación con el ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas garantizados por la Constitución. Además de la pena de prisión,
La fiscal solicita una multa de 3.600 euros y la inhabilitación del acusado durante siete años para ejercer profesiones u oficios educativos, en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre.
Asimismo, la fiscal pide que se prohíba al acusado acceder a la red social Facebook, lugar donde se cometieron los delitos, durante cinco años, lo que implica el cierre de su cuenta durante ese tiempo.
Los hechos tuvieron lugar entre octubre de 2018 y enero de 2019, cuando el hombre, de 49 años y sin antecedentes penales, utilizó su perfil abierto en Facebook para hacer comentarios como el siguiente: «Al moro, balas gruesas».
En días posteriores, también expresó,
Esto del cambio climático se nos va de las manos… Mira si va cambiando que hoy salgo a la calle de mi pueblo y en lugar de ver paisanos míos he visto más de 20 negros sueltos sin collar ni chip ni vacunas, ni tan siquiera cartilla veterinaria y parasitaria. Eso sí, los perros domésticos deben llevar todo en regla aún e ir atados.
En otra ocasión, publicó un artículo titulado «Muere un inmigrante en un salto masivo a la valla de Melilla», que iba acompañado de una vista aérea de la valla en la frontera de Melilla con Marruecos. En respuesta a esto, el acusado comentó lo siguiente: «Pobrecito!!!! Esa valla es un peligro!!! Deberían poner un sembrado de minas como toda la vida!! Así la noticia de un negro despachurrado no sería noticia!!!» acompañado de tres emoticonos riendo.
En otra ocasión, compartió otro artículo con el titular «El buque español Castilla destruye una ballenera pirata junto a las costas de Somalia». La noticia iba acompañada de una fotografía de una embarcación en llamas en medio del mar. El hombre comentó,
Esto se puede hacer con las pateras igual. Así ya no se les daría la carne cruda a los atunes no sea cosa que se infecten de Ebola o Denge. Que los negros y moromierdas no traen nada bueno… lo más normal el Sida.
En diciembre de 2018, compartió un vídeo en el que se podía ver cómo, aparentemente en un restaurante, un joven de apariencia árabe se resistía a dos hombres uniformados y posteriormente les agredía frente a un grupo de personas que observaban la escena. El acusado comentó: «Son gente de paz…. Pobres refugiados inocentes y amables sin formación ni experiencia militar ni de combate…. no padezcáis… Que los traemos para votar».
En enero de 2019, continuó con este tipo de comentarios y compartió un nuevo vídeo en el que un orador árabe daba una charla ante una sala llena de musulmanes. El acusado comentó,
Un moro normal es mucho más peligroso que un blanco racista.
Además, el acusado compartió posteriormente una publicación en la que se mostraban imágenes supuestamente relacionadas con el ataque de un grupo de terroristas en un complejo hotelero de Nairobi (Kenia) el 15 de enero pasado. A este respecto, el acusado añadió el siguiente comentario: «Estos pacíficos negritos son los que están invadiendo, con nuestro permiso, nuestro país y Europa».
Según sostiene la fiscal,
Todos estos comentarios fueron realizados por el hombre sin ninguna restricción para su visualización, teniendo todos ellos carácter público en la red social Facebook, e incitaban al odio contra los inmigrantes, especialmente de raza negra y árabe, menospreciándolos gravemente. Por esta razón, se le reclama provisionalmente una pena de tres años y medio de prisión.
Concluye.