La seguridad de los alumnos de Grans i Menuts, comprometida por los problemas cada vez mayores de acceso al colegio
Los padres y madres del alumnado del colegio Grans i Menuts siguen angustiados por la situación de acceso al centro educativo. A pesar de las quejas y demanda de soluciones de las familias por solventar el problema, la situación ha empeorado aún más tras quedar limitado el acceso a un solo vial de escasa capacidad.
El colegio, situado en la Cuadra la Torta, cuenta con dos entradas. Una de ellas está situada en el vial de reciente creación y de un solo carril que une la Cuadra la Torta con la Cuadra Casaña.
La otra entrada, utilizada también como salida de emergencia, da a un terreno de propiedad privada (antiguos dueños de TAU, y no los actuales propietarios de la fábrica situada junto al colegio), que durante muchos años sirvió de parking, entrada al colegio y punto de estacionamiento de autobuses para las frecuentes salidas escolares. Este terreno fue cedido para el citado uso prácticamente desde la creación del colegio, debido a que la construcción de la fábrica bloqueó la anterior entrada al colegio.
El año pasado el uso de dicho parking se vio dificultado tras instalar los dueños del terreno una valla justo frente a la entrada del colegio. Por este motivo, el alumnado de Grans i Menuts se vio obligado a acceder al colegio desde la cuadra, una carretera de doble sentido, sin aceras, arcenes y transitada además por camiones. Esto causó alarma entre las familias, y la situación se trató con los propietarios del terreno y con el propio Ayuntamiento. Tras esta reunión, el Ayuntamiento mejoró la circulación de la vía haciéndola de un solo sentido.
Pero la situación ha empeorado estas últimas semanas.
Al volver del descanso navideño, la sorpresa de madres y padres del alumnado de Grans i Menuts fue mayúscula cuando encontraron que se había instalado una nueva valla en el terreno a ras de carretera. Esta nueva valla imposibilita ahora aparcar en esa zona a cualquier vehículo. Por tanto, no sólo los niños deben caminar por viales no habilitados para ellos como, ya ocurría, sino que además, ahora lo hacen en un vial atestado de vehículos, ya que no hay otra forma de llegar al colegio y las madres y padres del alumnado no tienen más remedio que ocupar cada rincón del pequeño vial de la única puerta de acceso que ha quedado libre.
Las madres y padres del alumnado del colegio Grans i Menuts temen que en cualquier momento ocurra un accidente involucrando vehículos y niños ante la pasividad de los involucrados en este conflicto. La peligrosidad en el acceso en horas punta es algo que preocupa a toda la comunidad educativa desde hace tiempo, y así se ha trasladado al Ayuntamiento y a los propietarios del terreno en varias ocasiones desde hace años sin respuesta efectiva por ninguna de las partes.
El colegio ha tratado de adquirir el terreno en diversas ocasiones, pero no se ha conseguido un pacto razonable. El problema, que ya era serio, se ha agravado, y las madres y padres se sienten totalmente desamparados, desinformados por todas las partes, frustrados ante la situación, y con el temor de que los niños puedan sufrir un accidente en cualquier momento.
Por todo, demandan que con la mayor urgencia se dé solución a este problema.
