Un estudio indica que las mujeres se ven más afectadas por la pobreza de tiempo y sus consecuencias en la salud en comparación con los hombres.
Una investigación realizada en España revela que las mujeres tienen mayores probabilidades de experimentar escasez de tiempo, y aunque la pobreza de tiempo está relacionada con el número de hijos en ambos sexos, en el caso de los hombres no se vincula con ningún indicador de salud, mientras que entre las mujeres se asocia con un estado de salud mental deficiente.
El estudio, liderado por la investigadora Lucía Artazcoz del área de Epidemiología y Salud Pública del CIBER (CIBERESP), sugiere que el uso del tiempo puede ser un determinante social crucial de la salud y de las desigualdades de género en la salud.
A nivel local, en muchas ciudades europeas, se podría reducir la pobreza de tiempo mediante intervenciones que incluyan el aumento de servicios públicos asequibles y de alta calidad para el cuidado de personas dependientes.
El equipo de investigación analizó los datos de la Encuesta de Salud de Barcelona 2021, la cual incluyó a trabajadores y trabajadoras de entre 16 y 64 años. Descubrieron que la pobreza de tiempo era más frecuente en las mujeres, principalmente debido al tiempo que dedican al trabajo doméstico y de cuidado, lo que resulta en menos tiempo disponible para actividades remuneradas y no remuneradas.
Lo más preocupante es que esta pobreza de tiempo estaba relacionada con problemas de salud, especialmente entre las mujeres.
Señala Artazcoz, quien ha publicado los resultados en ‘J Epidemiol Community Health’.
En las mujeres, la pobreza de tiempo no solo se vincula con un mal estado de salud mental, sino también con pocas horas de sueño, baja calidad del sueño y baja actividad física en el tiempo libre.
Como parte de una estrategia integral para abordar la pobreza de tiempo, las investigadoras sugieren mitigarla mediante la mejora y ampliación de servicios públicos accesibles y de calidad destinados al cuidado de personas dependientes.
