Gómez: "El Botànic, dejó a los departamentos de salud de Castellón y La Plana sin realizar colonoscopias dentro del programa de cribado de cáncer de colon".
La Conselleria de Sanidad ha instruido la intervención de los servicios de Inspección de la Generalitat para llevar a cabo una evaluación exhaustiva de la gestión de la Dirección General de Salud Pública en los últimos años. Esto se debe a los indicios de irregularidades identificados en los informes de análisis del estado de situación elaborados por técnicos de la Conselleria, así como a la total falta de transparencia y opacidad en los sistemas de información disponibles.
En una reunión presidida por el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, con la participación de miembros de la Inspección General de Servicios de la Generalitat y de la Inspección Sanitaria de la Conselleria, y con la presencia del secretario autonómico de Sanidad, Francisco Ponce, y la directora general de Salud Pública, Ruth Usó, se destacó,
Los informes indican el abandono de los programas de cribado de cáncer de mama y colon en los últimos años.
En relación con el programa de detección precoz de cáncer de mama, se señaló, entre otras cuestiones, un serio déficit de inversión en el mantenimiento y la renovación de mamógrafos obsoletos. Esto ha generado múltiples fallos en el funcionamiento de los equipos, obligando a paralizar la actividad de la Unidad de Prevención de Cáncer de Mama (UPCM) afectada en cada fallo.
Además, se observa una preocupante escasez de personal, ya que la plantilla actual consta únicamente de 15 radiólogos en activo para cubrir las 24 Unidades de Prevención de Cáncer de Mama (UPCM), encargadas de aproximadamente el 35 % de las lecturas anuales de mamografías. En los últimos ocho años, no se ha proporcionado cobertura ni se ha implementado ninguna reorganización del programa para abordar esta necesidad. Más del 60 % de las lecturas se realizaban en jornadas extraordinarias por el personal de plantilla. En mayo de 2023, se derogó la normativa que regulaba el programa, incluyendo toda la actividad estructural realizada como actividad extraordinaria en el Acuerdo de Módulos de 2023. Esto dejó al programa sin una regulación específica sobre la gestión de las lecturas de mamografías y su correspondiente remuneración.
Estas circunstancias se suman a serias deficiencias funcionales y de seguridad en el sistema de información del programa, así como a la falta de integración con los sistemas asistenciales, lo que ocasiona dificultades y retrasos en la derivación de casos sospechosos a hospitales.
Destacó el conseller.
El responsable de Sanidad ha señalado que «el programa carece de la estructura necesaria para satisfacer la demanda. De hecho, en lugar de invitar a participar a las 410,000 mujeres que deberían hacerlo según el rango de edad, realmente se invita a algo menos de 250,000″.
Por lo tanto, acumula retrasos de hasta tres o cuatro años para invitar a participar a mujeres que corresponden por rango de edad (a partir de los 45 años) y excede el plazo de dos años para realizar las mamografías de seguimiento a aquellas que ya están integradas en el programa», agregó.
Decadencia del programa con el Botànic
Marciano Gómez ha destacado que la Conselleria ha identificado «una clara falta de coherencia orgánica y funcional en el programa de cribado de mama, resultado de la misma falta de armonización política y funcional que existía entre la Dirección General de Salud Pública, encargada de gestionar el programa, y la Dirección General de Asistencia, que supervisaba al personal de las Unidades de Prevención de Cáncer de Mama (UPCM) a través de los departamentos de salud».
La falta de coordinación dentro del Botànic contribuyó al declive de este programa, que inició en 1992 con solo 3 unidades y se expandió gradualmente hasta alcanzar las 24 actuales en 2001, una por cada departamento de salud, convirtiéndose así en un programa pionero y un referente nacional en la detección temprana del cáncer de mama.
Explica el conseller.
En la actualidad, con la entrada en vigor del Acuerdo del 30 de enero de 2024 del Consell, que habilita programas específicos de productividad para abordar necesidades temporales de actividad asistencial y preventiva, se adapta el programa de cribado de mama a la normativa actual en cuanto a los modelos de remuneración y la jornada máxima anual del personal de instituciones sanitarias.
Además, la actividad de las 9 UPCM sin radiólogos asignados se traslada a las unidades de radiología de hospitales mientras se lleva a cabo la reestructuración y el redimensionamiento del programa y su plantilla. En este sentido, Marciano Gómez ha anunciado que el nuevo equipo de la Conselleria «trabaja desde hace meses en la reorganización de procesos y en la incorporación de tecnología e innovación, con el objetivo de revitalizar el programa de detección temprana de cáncer de mama y lograr un modelo eficaz y eficiente que garantice coberturas, así como en la renovación del equipamiento«.
Cribado de cáncer colorrectal
Por otro lado, la información recopilada revela que el gobierno autonómico, conocido como el Botànic, dejó a los departamentos de salud de Castellón y La Plana sin realizar colonoscopias dentro del programa de cribado de cáncer de colon desde mayo de 2022, a pesar de continuar enviando invitaciones para participar en el programa.
No fue hasta octubre de 2022 cuando la Conselleria de Sanidad decidió externalizar más de 1,000 colonoscopias pendientes acumuladas en Castellón, a pesar de que ya en mayo se tenía constancia oficial del cese en la realización de pruebas de confirmación diagnóstica de cribado. El conseller señaló,
Ante la incapacidad de gestión de los responsables de la Conselleria en ese momento, al no ser capaces de activar la realización de colonoscopias en los hospitales públicos, el Botànic recurrió, una vez más, a su tan denostada sanidad privada.
Es importante destacar que, a pesar del cese total de las colonoscopias del programa de cribado en Castellón en mayo de 2022, la Dirección General de Salud Pública continuó enviando invitaciones para participar en el programa, acumulando así una bolsa de pruebas diagnósticas pendientes que ascendía a cerca de 700 en julio de 2023.
El nuevo equipo de la Conselleria ha trabajado para reactivar el programa en la provincia de Castellón, incorporando al Hospital General de Castellón y al Hospital de La Plana para la realización de estas pruebas diagnósticas de cribado, que hasta ese momento solo eran realizadas por el Hospital Provincial de Castellón.
En la actualidad, los tres hospitales llevan a cabo una media de 60 colonoscopias semanales como parte del programa de cribado. Han logrado pasar de no realizar ninguna desde mayo de 2022 a reactivar el programa de manera efectiva, con el objetivo de reducir la acumulación de pruebas pendientes y alcanzar la cobertura adecuada lo antes posible.
El conseller de Sanidad ha elogiado el «enorme esfuerzo y la excelente labor coordinada» de estos hospitales junto con la Conselleria para asumir la reactivación del programa y abordar la bolsa de demoras acumulada.
En cuanto al procedimiento del programa, las personas en edad comprendida entre los 50 y 69 años son invitadas por la Conselleria a participar en el programa de cribado. Reciben una carta junto con el test o prueba de cribado, que deben realizar en sus hogares. Esta prueba implica el análisis de una muestra de heces para detectar posibles rastros de sangre mediante un test de sangre oculta en heces de tipo inmunológico cuantitativo. Este proceso de cribado se realiza cada dos años. En caso de que el resultado sea positivo, se ofrece la opción de someterse a una colonoscopia óptica, la cual puede confirmar el diagnóstico de lesiones como pólipos o cáncer de colon.
Cribado de Cérvix
En relación al programa poblacional de cribado de cáncer de cérvix, destinado a mujeres de entre 25 y 65 años, la Dirección General de Salud Pública está actualmente trabajando en su implementación de manera gradual. Aunque el Botànic anunció en febrero de 2023 que el programa comenzaría después del verano para realizar las pruebas en 2024, «la realidad es que no se ha dado ningún paso concreto para garantizar su implementación dentro del plazo establecido».
En 2019, se incorporó el Programa de Prevención de Cáncer de Cérvix Poblacional a la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud, con la indicación del Ministerio de Sanidad de que debería implementarse en un periodo de 5 años y alcanzar una cobertura del 100% en un plazo de 10 años.
Desde entonces, no solo la planificación del Botànic parece agotar el plazo, sino que el nuevo equipo de la Dirección General de Salud Pública se ha enfrentado a la falta de desarrollo de herramientas básicas para su puesta en marcha, como es el caso del sistema informático necesario para recopilar la información asociada al cribado.
Añade el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, quien asimismo destaca que, «una vez más, se anunció una iniciativa sin que se llevaran a cabo las acciones necesarias, a pesar de la obligación de incorporar este cribado a la cartera de servicios en el plazo establecido. En este momento, la Conselleria está trabajando intensivamente en el desarrollo de ese sistema de información, que es fundamental para poder iniciar la implementación del programa lo antes posible. Concluyó el conseller.