La borrasca Kirk golpeó con intensidad gran parte de España, excepto las Islas Canarias.
Los restos del huracán dejaron lluvias torrenciales, tormentas y rachas de viento huracanadas que superaron los 200 km/h, causando múltiples incidencias. En Almassora (Castellón), el fuerte viento derrumbó árboles en el Jardín del Pintor Pesudo, aunque no se reportaron heridos.
Muchos puntos de la Comunitat Valenciana se vieron sacudidos por el paso de la borrasca Kirk; el litoral de Castellón se vio afectado por vientos de fuerza 7 y olas de 2 a 3 metros, con rachas de hasta 116 km/h registradas en Buñol y 108 km/h en Xodos, según el Centro de Coordinación de Emergencias. Otras localidades como El Toro y Olocau del Rey también registraron vientos de 97 y 89 km/h respectivamente. En Castelló de la Plana, Villar del Arzobispo y Requena, se midieron rachas de hasta 72 km/h.
El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia intervino en Venta del Moro para reparar daños eléctricos tras la caída de un poste. Mientras tanto, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado que tras el paso de Kirk, una nueva borrasca traerá más lluvias a partir del viernes.
En el norte peninsular, los vientos más fuertes se registraron en los Picos de Europa, alcanzando los 205 km/h. Otras zonas de montaña como Valdezcaray (La Rioja) y La Covatilla (Salamanca) reportaron rachas de 165 y 145 km/h respectivamente.
Fotografías: José Manuel Manrique.
