La cabalgata de los Reyes Magos en Benicàssim fue un éxito, demostrando una vez más la magia y tradición de esta festividad.
Los Reyes Magos de Oriente visitaron Benicàssim, dejando un rastro de alegría entre los niños y niñas del municipio. La ilusión se desbordaba en las calles mientras sus Majestades recorrían la localidad, cumpliendo con la entrañable tradición. Como es costumbre, también dedicaron tiempo a la Residencia Geriátrica, llevando su magia y cariño a los residentes.
Sin embargo, a última hora, las previsiones meteorológicas anunciaron fuertes vientos, lo que obligó a tomar medidas preventivas y modificar el recorrido planificado para la cabalgata. A pesar de este inconveniente de último momento, la organización se adaptó con rapidez para garantizar la seguridad de todos los participantes y espectadores.
El nuevo trayecto condujo a Sus Majestades desde el emblemático Puente de Hierro hasta la Iglesia, donde adoraron al Niño en un emotivo acto. La espiritualidad se mezcló con la tradición, creando un momento especial para la comunidad. Posteriormente, en la carpa del Bulevar, los Reyes Magos compartieron momentos de felicidad con los niños y niñas de Benicàssim, entregando regalos y escuchando con atención los deseos de los más pequeños.
