La central acumula un factor de disponibilidad cercano al 90%, situándola como una de las centrales más fiables de su tecnología a nivel mundial.
La central nuclear de Cofrentes, ubicada en Valencia, se consolida como la principal fuente de generación de energía eléctrica en la Comunitat Valenciana en 2023. Durante este periodo, registró una producción bruta de 8.264 gigavatios hora (GWh) libres de emisiones de CO2. Esta cifra representa aproximadamente el 3,2% del total nacional y el 44% de la energía generada en la región.
La energía generada por Cofrentes en el año pasado equivale al consumo eléctrico de más de dos millones de hogares y contribuye activamente a mantener la estabilidad y fiabilidad de la red eléctrica nacional. En un contexto donde las fuentes renovables, como la energía solar fotovoltaica y la energía eólica, tienen una presencia cada vez mayor, la central nuclear desempeña un papel significativo, según destacó Iberdrola en un comunicado.
El factor de operación de la central durante el año alcanzó el 88,86%, al estar acoplada a la red durante 7.784 horas de las 8.760 horas posibles y permanecer inactiva durante 38 días por el periodo de recarga de combustible.
Históricamente, la central acumula un factor de disponibilidad cercano al 90%, situándola como una de las centrales más fiables de su tecnología a nivel mundial. Su funcionamiento evita anualmente la emisión a la atmósfera de tres millones de toneladas de CO2.
Adicionalmente, la compañía destaca que la planta ha concluido el año 2023 con resultados «excelentes» en términos de seguridad. Según datos públicos e independientes del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), el organismo regulador, la instalación se encuentra en la mejor condición en la matriz del Sistema Integrado de Supervisión de Centrales (SISC), un programa de evaluación sistemática del funcionamiento de las centrales del CSN que observa su comportamiento a través de indicadores y hallazgos de inspecciones.
En cuanto a cuestiones medioambientales, la central ha renovado la certificación EMAS III (Eco-Management and Audit Scheme), considerada como la certificación ambiental más exigente a nivel europeo, que obtuvo por primera vez en 2009.
Durante 2023, la planta de Cofrentes ha invertido un total de 45,9 millones de euros, de los cuales 24,3 millones se destinaron a la 24ª recarga de combustible. Estas inversiones buscan la continua modernización y actualización tecnológica de la instalación, representando un estímulo significativo para el empleo y la economía local. La planta genera alrededor de 2.000 empleos de calidad, entre directos, indirectos e inducidos en la región. Concluye Iberdrola en un comunicado.