La Generalitat reabre hoy la CV-42 y un tramo de la CV-36 y restablece la circulación en 16 de las 18 carreteras afectadas por las inundaciones.
La Generalitat ha reabierto hoy tanto la CV-42 como un importante tramo de la CV-36, restableciendo así la circulación en 16 de las 18 carreteras que habían quedado afectadas por las inundaciones recientes.
En los últimos días, se han realizado trabajos de restauración y limpieza en el puente ubicado en el punto kilométrico 4+580 de la CV-42, con el objetivo de restablecer la conexión con el municipio de Algemesí y reabrir el acceso a otras vías que permiten la comunicación con la comarca de la Ribera Alta.
Por otro lado, este sábado también se procederá a la reapertura de otro tramo de la CV-36, una de las principales arterias de acceso y salida de Torrent, esencial para la conectividad de l’Horta Sud. Esta carretera fue cerrada debido a los graves daños sufridos por el desbordamiento del barranco del Poyo.
Los trabajos realizados han consistido en la estabilización de taludes, limpieza y reparación del asfalto en un tramo de la carretera. Gracias a estas labores, se podrá restablecer la circulación de la CV-36 desde el enlace con la CV-33 hasta el polígono industrial Mas del Jutge, además de recuperar la conexión con las carreteras CV-403 y CV-410. Esta actuación mejorará la comunicación y el acceso entre estas vías locales y varios municipios de l’Horta Sud, como Aldaia, Alaquàs y Xirivella.
La reapertura de este tramo de la CV-36 se suma a la de la misma carretera que se produjo el pasado jueves, cuando se restableció el acceso a la zona industrial de Torrent a través del by-pass. No obstante, una parte de esta vía sigue cerrada debido al colapso de dos puentes durante la riada, y continúan los trabajos para encontrar una solución provisional y abordar la reparación completa.
La recuperación de la CV-42 y de un tramo de la CV-36 se suma a la reapertura de otras carreteras en los últimos días. Las primeras vías reabiertas en la zona más afectada fueron la CV-400 y la CV-407, en las que se retiraron numerosos obstáculos y vehículos dañados que impedían el paso. Además, se eliminó una capa de barro importante y se restauró el sistema de alumbrado para facilitar las labores nocturnas.
La Generalitat también ha reabierto esta semana la CV-33, una vía clave para mejorar la conectividad entre l’Horta Sud y Valencia. En el punto kilométrico 8+100, a la altura de Torrent, dos puentes que atravesaban el barranco del Poyo quedaron gravemente dañados; uno de ellos se desplomó por completo, mientras que el otro sufrió daños significativos. Sin embargo, ya se han reparado y uno de los puentes ha sido restaurado, habilitando un carril por sentido.
Además, se han finalizado los trabajos de emergencia en la CV-390, lo que ha permitido restablecer la movilidad en la comarca de Los Serranos. Ayer, también se reabrió el puente de la entrada norte de Torrent, lo que facilitó la apertura completa de la CV-403, que ahora está conectada con el tramo de la CV-36 que se ha reabierto.
La Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio continuará con los trabajos para restaurar los puentes dañados y llevar a cabo otras mejoras necesarias en muchas de las carreteras afectadas, con el fin de dejarlas operativas en su totalidad lo antes posible.
