Agentes inician controles estáticos hasta abril para evitar incidentes
La Policía Local de Almassora ha iniciado la campaña de vigilancia del campo ante el posible robo de cítricos y de seguridad vial en caminos coincidiendo con la temporada de recolección. El dispositivo prevé controles estáticos hasta el mes de abril para evitar incidentes, más aún debido a la pandemia de coronavirus que obliga a cumplir medidas extraordinarias de seguridad.
De esta forma, el comisario jefe, Roberto Verdoy, ha informado de la realización inmediata por parte de agentes municipales de controles estáticos en la vía de servicio de la CV-18, el camino Benafelí (cruces con travesía San Antonio y San José y el camino Collantes), el Camí la Mar (en la vía de servicio de la CV-18, la travesía San Antonio y Marjalet), el camino Els Clots, del Mig y Fondo.
En este sentido, la Policía Local recuerda que las ocupaciones irregulares de la calzada por el estacionamiento de vehículos o el depósito de cajas para el transporte de la fruta o de otros materiales supone un riesgo para los vehículos que transitan por la zona, además de no garantizar la seguridad laboral de los recolectores y conductores que manipulan cargas en los viales. En caso de ser imprescindible el estacionamiento en la calzada, los conductores deben reforzar la señalización.
Además, el departamento municipal aconseja a recolectores y propietarios que no dejen visibles en el interior de vehículos estacionados en el campo objetos de valor (ropa, teléfonos móviles u otros) y que informen de aquellos vehículos y personas que sean observados en el campo y que puedan resultar sospechosas. En la misma línea, la recomendación pasa por retirar los productos pendientes de carga de los márgenes de los caminos, sobre todo en horas nocturnas.
Por otro lado, respecto a posibles contagios de coronavirus entre trabajadores del campo, el Ayuntamiento mantiene disponible el albergue de Santa Quitèria por si fuera necesario aislar a alguna persona enferma. De momento, el edificio ubicado junto a la ermita está vacío y cuenta con todo el mobiliario y las medidas higiénicas que establecen las autoridades sanitarias.