Los agentes pusieron en grave riesgo su vida, atravesando la riada para rescatar a los vecinos que todavía se encontraban atrapados en el interior de las viviendas
Agentes de la Policía Nacional evacuaron y rescataron a decenas de vecinos de la urbanización «El Pantano» en Torrent, cuyos hogares quedaron gravemente afectados por el desbordamiento del barranco debido a la DANA. Ante la situación extrema, con un torrente de agua arrastrando todo tipo de sedimentos y alcanzando una altura aproximada de cuatro metros, los agentes actuaron con rapidez, evacuando a unas 60 personas y llevándolas a lugares elevados.
Los hechos ocurrieron el martes sobre las 18:30 horas, cuando la Sala CIMACC-091 alertó a los efectivos de seguridad ciudadana de Torrent sobre el desbordamiento del barranco a causa del temporal. Minutos después, la situación se complicó debido a la rápida crecida del agua, que inundó la primera línea de viviendas. Ante el peligro inminente, los agentes adoptaron medidas arriesgadas para rescatar a las personas atrapadas. Dos policías, Juan Manuel y Carlos, atravesaron la riada, creando una línea de rescate con una cuerda, lo que permitió salvar a varias personas.
Tras completar la evacuación de los primeros residentes, los agentes lograron rescatar a una familia de la vivienda contigua, a pesar del aumento del caudal y la fuerza de las corrientes. Después de asegurar a todos los vecinos, intentaron abandonar la zona inundada, pero quedaron atrapados en una de las áreas más afectadas. Con el descenso del agua, iniciaron nuevas búsquedas y escucharon gritos de auxilio provenientes de una casa, que estaba siendo aplastada por dos árboles caídos. Rescatando a tres hombres mayores de edad en estado crítico, los agentes continuaron su labor.
Al evacuar a una pareja de la casa vecina, recibieron información sobre dos mujeres de edad avanzada que residían en la última casa del camino. Se dirigieron al lugar y encontraron la vivienda parcialmente derruida, con el agua a la altura de las rodillas. En el interior, localizaron a una mujer de 99 años, completamente entumecida por el frío, a quien los agentes trasladaron en volandas.
Tras 15 horas de servicio, y gracias a la disminución del caudal, los agentes pudieron abandonar la zona más afectada, logrando salvar la vida de numerosos vecinos gracias a su valiente y eficaz actuación.