La Torre de Benissahat es uno de los pocos vestigios de la antigua alquería musulmana que dio origen al núcleo urbano de la Vall d’Uixó
El Ayuntamiento de la Vall d’Uixó abrirá en las próximas semanas un nuevo espacio turístico y cultural ubicado en la planta baja de la Torre de Benissahat. Esta área ya cuenta con iluminación y un baño accesible. Una vez instalado el mobiliario, se podrá abrir parcialmente al público esta construcción del siglo XIII, fundamental para entender la historia de la ciudad.
La apertura responde a una reivindicación histórica: recuperar la torre para el uso público. La Torre de Benissahat, que hasta ahora era de propiedad privada, fue adquirida por el Ayuntamiento en 2022 gracias a fondos municipales. Tras la compra, comenzaron los trabajos de rehabilitación con una subvención autonómica. Sin embargo, con el cambio de gobierno en la Generalitat Valenciana, se retiró una ayuda previamente concedida, dejando la última fase de las obras pendiente de financiación.
Actualmente, queda pendiente la instalación del ascensor, la finalización del interior y las ventanas de la primera y segunda planta, así como el equipamiento y mobiliario. La alcaldesa, Tania Baños, ha expresado su pesar por la retirada de las ayudas por parte del PP y Vox, lo que impide terminar y mostrar las plantas superiores a los visitantes.
A pesar de estas dificultades, la planta baja se abrirá como un espacio cultural y turístico, donde se podrán realizar pequeñas exposiciones, presentaciones de libros y actos organizados tanto por el Ayuntamiento como por asociaciones culturales. Además, el consistorio seguirá reclamando a la Generalitat Valenciana los fondos correspondientes y está explorando otras fuentes de financiación, incluso desde el Gobierno de España.
Las fases ya completadas incluyen catas arqueológicas, documentación, consolidación de la estructura, refuerzo de forjados y cubierta con técnicas específicas para patrimonio histórico, eliminación de capas constructivas añadidas y recuperación de arcos, antiguos huecos de ventanas, tabiquería y piedra original.
La visita a la Torre contó con la presencia de la alcaldesa Tania Baños, el concejal de Patrimonio y primer teniente de alcalde, Fernando Daròs; el concejal de Urbanismo, Vicente Pitarch; y el concejal de Turismo, Javier Ferreres. Todos coincidieron en destacar la “apuesta por el patrimonio” que representan esta actuación, junto con la recuperación de la Fàbrica de la Llum, el Camí de l’Aigua y el edificio anexo al Ayuntamiento.
La Torre de Benissahat es uno de los pocos restos arquitectónicos que quedan de la antigua Alqueria de Benissahat, una de las seis alquerías musulmanas que se extendían a lo largo de la acequia y que marcan el origen del núcleo urbano de la Vall d’Uixó. Su restauración y apertura parcial contribuyen a enriquecer la oferta turística local, complementando el atractivo de les Coves de Sant Josep.
