Qué peligrosa es la ley de identidad sexual y cuanto daño está haciendo.
Es un deporte de riesgo pensar por uno mismo y formarse una opinión propia en lugar de asumir sin más las directrices que nos imponen, ya sea el Estado, la propia familia, los amigos o la pareja.
Ciertamente esta opinión propia puede estar equivocada, pero es fruto de tu raciocinio y, si con argumentos convincentes, alguien te hace ver tu error, la cambias y sanseacabó.
Nos quieren convencer, y muchos ya han aceptado sin más, sin el menor razonamiento, de que existe “ violencia machista”; pretenden hacernos creer que el hombre es violento por naturaleza y, en contraposición, la mujer un ser de Luz pura que vive maltratada por ese monstruo despreciable que tuvo la mala suerte de nacer hombre biológico.
Coincidirán conmigo en que si me quieren matar, por ejemplo, he de ser violento para defender mi vida y ello es positivo, y de esta guisa, hombres y mujeres la mostraríamos para sobrevivir y sería un acto positivo.
Tan solo quiero invitar al lector a razonar con un ejemplo, que se me ocurre muy gráfico, de la locura social en la que nos pretenden hacer malvivir y que tan solo precisa de una pequeña reflexión por tu parte para ver dónde estamos yendo, y el charco de lodo en el que nos metemos, pues nos va a costar mucho poder salir de él si no actuamos pronto.
Voy a hablaros de Juan y Rosario, una pareja ficticia, hombre y mujer “biológicos”, de los de antes de esta locura; Juan con atributos masculinos y Rosario con atributos femeninos y, por tanto, la capacidad de llevar dentro una vida nueva. Juan y Rosario son pareja y con el paso del tiempo, Juan, convencido por el engaño de las políticas de identidad sexual, asume que no termina de auto percibirse ni como de género masculino ni femenino, y cabalga entre ambos sentimientos de auto percepción, de manera que entra en lo que se denomina “género fluido” y a Rosario le ocurre lo mismo y a veces se auto percibe como género masculino y otras femenino.
Esta pareja, como todas las parejas del mundo, a veces discuten y en un momento dado, él y ella , ella y él, se dan una bofetada.
Obviamente, Rosario, “que no deja de ser mujer biológica”, denuncia a Juan por Violencia de Género contra ella, ¡faltaría más!
Sin embargo, en este mundo sin norte, sin orden y concierto en el que nos encontramos, a l llegar la policía al domicilio, los agentes han de realizar una pregunta importantísima para “averiguar qué ha ocurrido realmente y saber cómo han de gestionar la situación”.
Pues es crucial saber cómo se auto percibía cada uno, Juan y Rosario, en el momento de la bofetada. Y así los agentes han de preguntar cómo se percibían cada uno en el momento de las bofetadas.
No es una broma, no, pues si Juan se auto percibía como género masculino y Rosario como género femenino, sí que se habría producido un delito de la mal llamada violencia de género, ya que Juan sería un ser malvado y Rosario un ser de luz atacada por el monstruo de Juan, pero si Juan se auto percibía como de género femenino, “se encontraría entonces invadido por la Luz Divina” y lo que se ha producido es una riña de chicas que se han dado una bofetada, porque Juan ya no es un ser malvado sino una adorable y dulce mujer.
Sin embargo, en el supuesto de que Juan se auto percibiera como de género femenino y Rosario de género masculino, ha sido ella “la que, poseída por un espíritu diabólico se ha visto transformada de ser de Luz a mal tratador machista” y en este caso, la violencia de género la habría realizado “ ella ” puesto que ha pasado a ser “ él ” por su simple auto percepción de género y se la llevaría detenida la policía por Violencia de Género sobre Juan.
Ya sé que parece el guion de una mala película española, sin embargo espero que el lector, vea, por fin, LA GRAN MENTIRA QUE NOS INCULCAN, Y COMPRENDA “ QUE LA VIOLENCIA NADA TIENE QUE VER CON LOS ATRIBUTOS SEXUALES ” Y NO SE DEJE ENGAÑAR MÁS.
Por ello no me cansaré en defender mis ideas, aunque no coincidan con las que nos quieren imponer , y seguiré diciendo que el sol sale por el Este y que la tierra gira alrededor del sol, hasta que alguien me demuestre lo contrario, pues no me dejo convencer por estupideces y no consiento que se burlen de mí tan fácilmente.
Mateo
Presidente Asociación Policías por la Libertad
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