Vila-real rinde homenaje a la imagen de la virgen María Inmaculada durante las festividades que la congregación organiza en su honor.
La ciudad de Vila-real, en la provincia de Castellón, ha conmemorado la festividad principal de la Congregación de las Hijas de María Inmaculada, les Purissimeres, con la celebración de la misa solemne.
El alcalde de la ciudad, José Benlloch, y representantes de la corporación municipal participaron en la celebración eucarística, la cual fue presidida por el arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent, quien celebra hoy el primer aniversario de su nombramiento.
Este significativo evento religioso contó con la presencia destacada de autoridades locales y la comunidad, reafirmando el compromiso y la vinculación de la ciudad con sus tradiciones y expresiones de fe.
La presencia del arzobispo Benavent, en especial en el aniversario de su nombramiento, añadió un matiz especial a la celebración, destacando la importancia de la comunidad religiosa en la vida de Vila-real.
Una masiva eucaristía en la iglesia Arciprestal y una procesión solemne se llevaron a cabo para honrar a la imagen de María Inmaculada.
