El portavoz de Cs entiende que haya temas difíciles de consensuar pero negarse a instalar un termómetro es un capricho partidista de quien lo niega
El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Castellón, Alejandro Marín-Buck ha indicado que el “Fadrell está más preocupado de su crisis interna que dar soluciones a la sociosanitaria y económica derivada de la COVID-19”. En este sentido, ha lamentado que “la propuesta de Cs de instalar una cámara termográfica en ayuntamiento de Castellón para medir la fiebre fuera rechazada por el equipo de gobierno en el pleno pasado, sin embargo el gobierno de PSPV-Cs de Oropesa lo pondrá en marcha”.
“Una iniciativa como ésta, que claramente es una aportación objetiva, una medida de previsión y de prevención sensata como ya dijimos, la hace partidista la nula voluntad política de aquellos que la rechazan”, ha aclarado Marín-Buck.
El portavoz de Cs ha insistido que “en los tiempos de pandemia que corren, los responsables públicos debemos hacer un esfuerzo por consensuar lo mejor para los ciudadanos” y, ha continuado diciendo: “puedo entender que haya temas difíciles de consensuar, pero negarse a instalar un termómetro en la puerta del ayuntamiento cuando la fiebre es uno de los principales síntomas del virus, es un capricho partidista y egoísta de quien lo niega”.
Por último, Marín-Buck ha recordado que aunque “esto no se trata de una carrera para salir los primeros de la crisis, Castelló de la Plana, capital de provincia, podría haber sido el primer Ayuntamiento en adoptar una medida como esta, pero no. Nuestro ayuntamiento es un ejemplo de crisis interna de Gobierno; de falta de voluntad política; de falta de unidad porque los que la reclaman, predican sin el ejemplo”. En definitiva, “lamento decir que este motor para sacar a los castellonenses de la crisis de la COVID-19 está gripado”, ha concluido el responsable de Cs.
