Vicent Marzà se reúne en Bruselas con los patrones mayores de las cofradías de pesca valencianas para oponerse a la reducción de días de pesca en el Mediterráneo.
El eurodiputado de Compromís, Vicent Marzà, ha continuado con su labor de oposición a la propuesta de la Comisión Europea que pretende reducir en un 66% los días de pesca de arrastre en el Mediterráneo, una medida que amenaza gravemente la pesca valenciana.
Marzà ha estado acompañado en Bruselas por los patrones mayores de las cofradías de pesca valencianas, quienes consideran esta reducción como un “golpe mortal” para la pesca sostenible, un sector clave para la economía y la identidad de las comarcas valencianas.
El eurodiputado ya había denunciado previamente en el Parlamento Europeo el impacto destructivo de esta medida, destacando que la propuesta de la Comisión Europea pone en peligro la supervivencia de más de 556 embarcaciones que operan en el litoral valenciano y 17.000 puestos de trabajo directos e indirectos vinculados al sector pesquero.
Según Marzà, las cofradías de pescadores y las lonjas podrían desaparecer, transformando un sistema pesquero tradicional y de proximidad en un modelo privatizado que no tiene en cuenta las necesidades de las comunidades locales. Durante la reunión con los patrones mayores de las cofradías, Marzà reafirmó que esta medida representa una amenaza tanto para los pescadores como para las economías locales de los pueblos valencianos, que dependen de un sector pesquero sostenible.
En sus declaraciones, Marzà insistió en que la pesca de arrastre en el Mediterráneo no es solo una fuente de ingresos, sino que forma parte de la tradición y cultura del pueblo valenciano.
La propuesta de la Comisión Europea es un ataque contra la supervivencia de nuestras flotas y nuestras comunidades.
Afirmó Marzà. “No sólo se pone en peligro el trabajo, sino también un modo de vida que lleva siglos vinculado a nuestras costas”.
El eurodiputado de Compromís también hizo hincapié en la necesidad de que la Comisión Europea realice una evaluación exhaustiva del impacto socioeconómico de esta propuesta, que afectaría principalmente a las regiones mediterráneas. Marzà recordó que, en los últimos cinco años, la flota española de arrastre ya ha reducido sus días de pesca en un 40%, lo que ha llevado a amarres definitivos de embarcaciones y a una imposibilidad de relevo generacional en el sector.
“La reducción de los días de pesca no solo agrava las desigualdades entre territorios de la UE, sino que va en contra de los principios de justicia social y cohesión territorial que deben regir la política pesquera europea”, añadió Marzà.
Próximos pasos y seguimiento
Junto a los patrones mayores de las cofradías de pesca, Marzà ha intensificado sus esfuerzos para presionar a los Estados miembros de la UE para que bloqueen esta propuesta. Los pescadores valencianos han expresado su total apoyo a la iniciativa de Marzà y han destacado la necesidad de buscar soluciones viables que garanticen la sostenibilidad del sector y la preservación del modelo pesquero en el Mediterráneo.
Marzà ha solicitado que se convoque una evaluación política donde se escuchen las voces de los pescadores y las comunidades locales, y que se prioricen soluciones que respeten el equilibrio entre la conservación marina y la supervivencia económica de las regiones pesqueras.