Carles Mulet pide que el Gobierno “asuma el coste de estas infraestructuras” por las chapuzas, las prisas para ponerlas en marcha antes de final de mes y por haber ignorado las advertencias y requerimientos de los ayuntamientos afectados
El senador de Compromís por Castelló, Carles Mulet, ha lamentado que el Gobierno pretenda focalizar en la puesta en marcha con prisas de las desaladoras de Castellón antes del 31 de marzo la solución al problema de recursos hídricos que sufre la provincia “cuando las medidas deberían ser más amplias y se deberían haber solucionado ya en la actual legislatura, algo que no han propiciado ni PP ni PSOE, lo que ha puesto en graves aprietos a los ayuntamientos implicados”.
Mulet recuerda que el Gobierno ejecutó unos proyectos desproporcionados ante una realidad ficticia “como era la destrucción de la costa que propició el PP y un crecimiento sin límite que cegó a unos ayuntamientos y políticos hasta que la realidad les estalló en la cara”. Para el senador la responsabilidad del Gobierno y de la administración superior “es evidente” pues “en vez de dimensionar el proyecto optaron por seguir con sus planes al margen de las necesidades reales de los ayuntamientos a pesar de las advertencias de los nuevos ayuntamientos que surgieron con el cambio y cuyas decisiones pueden acabar pagando y afectando gravemente a los usuarios del agua”.
El senador ha lamentado “el escaso interés de PP en la primera parte de la legislatura y del PSOE en este último año por tomar medidas como asumir el coste de las plantas y liberar a unos ayuntamientos del coste de funcionamiento de estas plantas o de la espada de Damocles que supone la posible multa europea por demorar la puesta en servicio, por lo que ha sido necesario realizar unos convenios deprisa y corriendo con los ayuntamientos que posponen las soluciones a tomar que son claves, como es el coste de las plantas”. El PSOE podría haber dado un carpetazo a este problema“pero no ha sido así”, ha lamentado.
Mulet ha recordado que la evolución del clima lleva posiblemente a este tipo de plantas como alternativa al suministro de agua pero “los ayuntamientos seguirán unos años más con el corazón en un puño por si les toca pagar la inversión realizada, de manera que la solución transitoria de aparcar quien paga las plantas no es tal y a pesar de las promesas y perspectivas no han facilitado en nada la solución a este tema”.