Con el concurso tradicional se estimulaba más la imaginación y el interés de los artistas.
Opiniones a favor y en contra de la propuesta elegida, realizada por un equipo de diseñadores. A mí personalmente, el cartel me gusta. Es una obra limpia, clara y con luz, lo que no quita que provoque diferentes reacciones como ocurre ante cualquier obra artística, y más aún si se trata de Magdalena, donde las sensibilidades están a flor de piel.
Sin embargo, sí que es cierto que desde que se eliminó el tradicional concurso de carteles creo que ha bajado la calidad de los carteles elegidos.
La introducción de nuevas tecnologías para la realización del cartel creo que ha perdido el romanticismo acostumbrado para realizar estas obras. Los pintores han dado paso a los diseñadores perdiendo más posibilidades artísticas y de creación personal por mor de las nuevas tecnologías.
Con el concurso se estimulaba más la imaginación y el interés de los artistas que ponían toda su imaginación al servicio del cartel de la Magdalena.
El camino ahora es el diseño, pero ¿por qué no volvemos al concurso y recuperamos una de nuestras tradiciones?
Es una opinión.
Vicente Cornelles Castelló
Escritor y periodista
