Peñíscola cumple el sueño de Aitana, una niña que lucha contra el cáncer

El Castillo de Peñíscola (Castellón), famoso por ser escenario de películas «históricas» como ‘El Cid’ de Charlton Heston o ‘Juego de Tronos’, se transformó durante este fin de semana en el escenario de un cuento inspirado en la época medieval para hacer realidad el sueño de la pequeña Aitana, una niña que lucha contra el cáncer y anhelaba ser una auténtica princesa por un día.

Aitana está librando una «difícil batalla» contra el sarcoma de Ewing, una enfermedad que ha «marcado su vida» a tan temprana edad. La Fundación Pequeño Deseo, en colaboración con el Castillo de Peñíscola y Valentia Victrix, lograron convertir este deseo en realidad y situar a esta localidad de la provincia de Castellón «a los pies de esta pequeña luchadora», quien vivió su propio «cuento por un día», según destacó el colectivo en un comunicado.

La niña, recién cumplidos los cinco años, disfrutó de un «día mágico» que recordará «durante mucho tiempo», al igual que sus padres, quienes experimentaron un «momento extraordinario» alejado de la rutina hospitalaria y los tratamientos médicos. El castillo se engalanó para recibir a Aitana.

Las princesas Bella, Elsa, Blancanieves y Jasmín le dieron la bienvenida en la puerta y, guiada por ellas, Aitana pudo recorrer la fortaleza y sumergirse en un mundo de encanto y fantasía.

Posteriormente, presenció una auténtica batalla en el patio de Armas, donde 30 soldados medievales llegados de distintos puntos de España le rindieron pleitesía, junto a los visitantes que observaban admirados la escena digna de una película.

Acto seguido, todos los participantes disfrutaron de una comida medieval en la que compartieron los mejores momentos de esta jornada que quedará «en la memoria de todos». Esta experiencia acompañará a Aitana, la «verdadera guerrera» de esta historia, en los próximos meses y en su día a día en el hospital. «Regresamos a León con otra alegría, energía y esperanza. Ha sido un auténtico sueño este paréntesis en nuestra vida actual, donde de alguna manera se han detenido los juegos y la diversión, los amigos y la escuela, para Aitana», expresó Denisse, madre de esta «pequeña guerrera.

Desde que conocimos la enfermedad, toda nuestra rutina ha cambiado y gira en torno a ella, las pruebas, los resultados y el tratamiento. Verla sonreír y con esta fuerza nos hace seguir adelante y continuar en la lucha. Vamos a ganar la batalla, ella es una guerrera.

Agregó.

Por esta razón, agradeció a la Asociación Napoleónica Valenciana, a la lanzadora de hachas Carolina Gascón y a la Asociación Kuki por «asistir y sumarse al cumplimiento de este deseo que perdurará en la memoria de la niña y su familia durante mucho tiempo». También expresó su gratitud al restaurante El Arco por abrir sus puertas para celebrar la comida medieval, «a pesar de estar cerrados por vacaciones». Concluye.