Vox entra a cargo de las concejalías de Familia, Turismo, Comercio y Seguridad.
El acuerdo de coalición entre el Partido Popular y Vox en el Ayuntamiento de Castelló ha sido finalizado. Después de semanas de intensas negociaciones, se ha cerrado un pacto con 100 puntos y se han concretado tanto el programa conjunto como la distribución de cargos y salarios.
Hoy se oficializará el acuerdo mediante el cual la ultraderecha tomará el control de las áreas de Familia, Comercio, Turismo y Seguridad. Estas áreas, aunque de poca visibilidad, le permitirán a Vox entrar en el gobierno de la capital de la Plana.
Hasta hace algunas horas, el Ayuntamiento de Castelló era el único de los principales consistorios de la provincia donde el Partido Popular había ganado en minoría y aún no se había cerrado un pacto con VOX. Es importante mencionar que Burriana fue el primer ayuntamiento en llegar a un acuerdo con VOX, seguido por Almassora el pasado fin de semana.
Este lunes, finalmente se ha aprobado la estructura organizativa del Ayuntamiento, un mes y medio después de la investidura, así como los cambios en las retribuciones. Estas decisiones han suscitado acusaciones por parte de la oposición hacia la alcaldesa Begoña Carrasco, quien recibirá un salario superior al de Amparo Marco debido a su nombramiento como presidenta de Reciplasa.
La inclusión del partido de extrema derecha como socio en el gobierno local implica que dos de sus cuatro concejales ocuparán los puestos de tenientes de alcalde. Estos cargos serán desempeñados por el portavoz, Antonio Ortolá, y su adjunto, Alberto Vidal, quienes recibirán una remuneración bruta anual de 61.843,61 euros.
En el pleno de organización de este lunes, se dio a conocer una importante novedad respecto a los ediles de la formación de extrema derecha. Dos de ellos, Arantxa Miralles y Luciano Ferrer, también cuentan con una dedicación exclusiva, aunque percibirán unas retribuciones ligeramente inferiores, 59.843,61 euros. Además, se informó que Vox ha sumado tres asesores más como personal de confianza, todos ellos vinculados al gobierno, lo que eleva el número total a cuatro (siendo el cuarto asesor perteneciente al grupo).
El régimen retributivo fue aprobado durante la mencionada sesión de organización, lo que aceleró las conversaciones y condujo a un acuerdo que fue firmemente respaldado en horas de la tarde. Ya desde la sesión de la mañana, Ortolá había expresado su total predisposición al equipo de gobierno para concretar esta alianza.
El lunes pasado, Vox hizo un nuevo guiño al votar a favor de los sueldos y elogiar la gestión del ejecutivo local «por no aumentar el gasto público», lo que pone de manifiesto lo que era un secreto a voces después de los resultados en las urnas: que Castellón contará con un gobierno de derecha y extrema derecha. Esta acción se suma a la ocurrida hace menos de una semana, durante la sesión extraordinaria en la que se consideró la renuncia de Salomé Pradas.
El pleno celebrado un mes y medio después de la investidura ha estado cargado de tensión entre los diferentes grupos políticos debido a su peculiar calendario, algo que ha sido criticado por Compromís, que ha lamentado que la alcaldesa Begoña Carrasco haya priorizado los intereses de su partido por encima de los de la ciudad.
Ignasi Garcia, portavoz de la coalición, expuso durante el pleno que la propuesta de retribuciones fue presentada el 24 de julio, es decir, después de las elecciones. En este sentido, señaló que si la alcaldesa estuviera realmente orgullosa de la propuesta, no la habría ocultado hasta después de los comicios.
Compromís y el PSPV han votado en contra de las retribuciones del equipo de gobierno. Los socialistas acusan a Carrasco de mentir, ya que advierten que cobrará más que Amparo Marco al asumir la presidencia de Reciplasa.
La portavoz del grupo municipal socialista, Patricia Puerta, denuncia el «ninguneo» del Partido Popular, que ha estado más preocupado estos días por trabajar desde la oscuridad un pacto con la ultraderecha, un acuerdo con el partido que niega la violencia machista, que se ríe del cambio climático o que prohíbe libros.
El portavoz del Partido Popular (PP), Vicent Sales, ha señalado a PSPV y Compromís por sus incoherencias al votar en contra de la reorganización salarial en el Ayuntamiento de Castelló, mientras apoyan una subida de casi el 65 por ciento en los sueldos en la Diputación.
Vox ha demostrado su respaldo al PP al apoyar las medidas propuestas por el equipo de Gobierno en el pleno, según explicó su portavoz, Antonio Ortolá.
El pleno municipal, aparte de aprobar cambios en las retribuciones y en la organización del consistorio, ha dado luz verde a la incorporación de la concejala Mayca Hurtado como nueva edil del PP, en reemplazo de la consellera Salomé Pradas. Asimismo, se ha acordado que las sesiones plenarias tendrán lugar los últimos jueves de cada mes a las 11 de la mañana.
Organigrama Gobierno PP-Vox Castellón
