La búsqueda del toro escapado en Almenara se amplía y refuerza en las últimas horas: Se pide precaución a la población.
La pequeña localidad de Almenara, en la provincia de Castellón, vive días de incertidumbre tras la desconcertante desaparición de un toro el pasado 12 de agosto. El animal, perteneciente a la ganadería de Faet y ubicado en la partida Covatelles, parece haberse desvanecido sin dejar rastro en la vasta y montañosa región.
Lo que comenzó como una simple búsqueda se ha transformado en una operación de gran envergadura. A las unidades iniciales de la Policía Local, la Guardia Civil, Protección Civil y la Policía Autonómica, se han sumado en las últimas horas un destacamento del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón, otro de Valencia, y una unidad especializada en incendios forestales de la Comunidad Valenciana. Esta coalición, equipada con cámaras térmicas de visión nocturna y drones, rastrea incansablemente la región en busca del toro perdido.
El consistorio de Almenara ha lanzado un comunicado en redes sociales para mantener a la población informada, asegurando que la búsqueda continúa sin descanso. No obstante, se ha emitido una advertencia clara:
Extremar la precaución en las zonas rurales, especialmente en la parte alta del término municipal, donde se cree que podría estar el toro.
Las autoridades, sin embargo, han intentado tranquilizar a los vecinos asegurando que el animal no se encuentra cerca del casco urbano.
La historia toma un giro más intrigante al revelarse que la fuga del toro podría estar relacionada con un intento de robo en la finca de la ganadería. Según fuentes policiales, los ladrones, al huir, dejaron abierta la puerta del recinto donde se encontraba el toro, facilitando su escapada. El propio ganadero, Juan Faet, quien descubrió los destrozos en la zona de almacenaje de metales, quedó perplejo al ver la puerta completamente abierta.
Mientras tanto, el ganadero ha tomado medidas adicionales para atraer al toro de vuelta, dejando a unos mansos cerca de su última ubicación conocida, con la esperanza de que el animal, en busca de agua y comida, retorne por su cuenta. Sin embargo, hasta ahora, no ha habido señales del toro ni de los ladrones que provocaron esta situación.
La tensión crece en Almenara, donde la incertidumbre reina mientras el toro continúa en paradero desconocido. Con cada día que pasa, la desaparición se convierte en un enigma cada vez más inquietante, dejando a todos preguntándose: ¿Dónde está el toro de Almenara?