Mas de tres millones de metros cuadrados para la urbanización industrial.
Las máquinas regresaron este martes al antiguo polígono de la carretera de Onda, que ahora ha sido reconvertido en el nuevo PAI (Plan de Actuación Integral) del Clúster de la Innovación Cerámica Ciutat de Vila-real en Castellón. Este acontecimiento marcó el inicio definitivo de la reactivación del proyecto después de 24 años, durante los cuales se enfrentó a cinco crisis, dos reevaluaciones, varias modificaciones, alegaciones, recursos y un arduo trabajo de gestión urbanística, además de 543 notificaciones a los propietarios afectados.
El alcalde de la ciudad, José Benlloch, acompañado por el concejal de Urbanismo, Emilio M. Obiol, y representantes de la empresa adjudicataria, Urbanizadora Plana Baixa (BECSA Simetría), visitó el comienzo de las obras que marcan esta reactivación. El proyecto de urbanización abarca más de tres millones de metros cuadrados en total y aspira a «marcar el futuro del desarrollo y el progreso de Vila-real, bajo criterios de innovación y sostenibilidad, como polo de atracción de oportunidades y nuevas inversiones a la ciudad», según informó el Ayuntamiento de Vila-real en un comunicado.
Antes de la visita, Benlloch y Obiol se reunieron con los responsables de la empresa, Carlos Muñoz, Manuel Montoliu y Paco Gascón, junto con el coordinador de Urbanismo municipal, Simón García, y el arquitecto municipal, Ernesto Ramos.
El alcalde destacó que el PAI del Clúster de la Innovación Cerámica será un punto de inflexión en el desarrollo industrial no solo de Vila-real, sino también de su entorno. Será un polígono innovador y sostenible que, una vez completado, se convertirá en uno de los mejores de la provincia. Mejorará significativamente el proyecto inicial de 1999, que fue paralizado en 2008, y proporcionará suelo industrial de calidad que no solo mejorará la competitividad de las fábricas instaladas en el polígono, sino que también atraerá nuevas inversiones.
El antiguo PAI de la carretera de Onda fue aprobado en 1999 y posteriormente modificado, pero una reevaluación en 2008 nunca llegó a realizarse. La crisis financiera y la inacción del gobierno anterior llevaron a la paralización del proyecto, dejándolo con solo un 34% de ejecución, hasta que el actual equipo de gobierno lo retomó en 2011, adaptándolo a las necesidades de la nueva Vila-real del siglo XXI. La modificación del convenio urbanístico y el proyecto de urbanización se aprobó definitivamente el pasado mes de octubre.
El PAI industrial del Clúster de la Innovación Cerámica consta de 43 unidades de ejecución e incluirá 220,000 metros cuadrados de zonas verdes, 254,000 metros de vías y cinco kilómetros de carril bici. También incorporará importantes novedades, como puntos de recarga para vehículos eléctricos, iluminación LED, áreas deportivas y recreativas, así como materiales sostenibles y reciclados para la pavimentación de calzadas y aceras, junto con sistemas de optimización de alcantarillado.
El presupuesto total de la obra, con un plazo de ejecución de 40 meses, supera los 44 millones de euros. Para ello, se ha aprobado una reevaluación del 19.3% (inferior a la prevista en 2008) para actualizar los precios del proyecto original, que tiene ya 24 años de antigüedad. Benlloch también agradeció a Becsa Simetría por su disposición para desbloquear el PAI.
El alcalde enfatizó que este proyecto será de gran importancia para atraer inversiones que ya están llegando y llegarán en el futuro, gracias a proyectos estratégicos como la planta de Volkswagen, la futura intermodal de la cerámica o el acceso al Puerto, lo que hará que el suelo industrial de la ciudad sea muy atractivo.