El elemento central del proyecto es la construcción de un pabellón acristalado que transformará el albergue en un espacio del siglo XXI.
El Ayuntamiento de Vila-real (Castellón), ha dado inicio a las labores de rehabilitación y ampliación del Albergue de la Mare de Déu de Gràcia, un proyecto destinado a mejorar la utilización de este espacio al mismo tiempo que se integra de manera armoniosa en su entorno, respetando su singularidad arquitectónica. En una presentación realizada esta mañana, el concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, estuvo acompañado por los arquitectos del estudio Emac, Pau Batalla y Miguel Martínez, quienes son los autores del proyecto, así como por representantes de la empresa Zarzoso, responsable de la ejecución de los trabajos.
Obiol destacó que se trata de un proyecto de gran relevancia que permitirá expandir las posibilidades de uso del albergue. Esto se logrará mediante la construcción de un pabellón acristalado que también contribuirá significativamente a la mejora y restauración del edificio. El albergue se encuentra en el hermoso entorno natural del Termet de la Mare de Déu de Gràcia. El concejal elogió el trabajo de los arquitectos, quienes cuentan con una amplia y reconocida experiencia en la dirección de obras y en la obtención de concursos de ideas. Además, agradeció a la empresa Zarzoso su compromiso y colaboración para hacer realidad este proyecto, que enfrentó desafíos en el proceso de licitación.
Finalmente, el proyecto fue adjudicado en la última licitación por un importe de 503.000 euros y tiene un plazo de ejecución de seis meses. La Diputación de Castellón ha aportado gran parte de la financiación, con 360.000 euros, por lo que Obiol expresó su gratitud a la institución provincial por su valiosa colaboración.
El concejal enfatizó que la rehabilitación se enfoca en preservar la singularidad e identidad del edificio, que fue diseñado en 1930 como parte de un ambicioso proyecto del arquitecto Eugenio Cendoya para urbanizar toda la zona y crear una ciudad-jardín. Sin embargo, debido a diversas circunstancias, el proyecto «Mucho aire y mucho sol» solo se materializó en la escalinata y el albergue, concebido como un pabellón de verano.
Por su parte, Pau Batalla expresó su agradecimiento al Ayuntamiento de Vila-real por el apoyo y la oportunidad profesional que representa esta intervención arquitectónica, ya que «el Termet es uno de los espacios más emblemáticos de Vila-real y la comarca«. El arquitecto resaltó que el elemento central del proyecto es la construcción de un pabellón acristalado que transformará el albergue en un espacio del siglo XXI.
Batalla explicó que la idea principal del proyecto es devolver el edificio a la actividad contemporánea. El elemento más destacado es el pabellón frontal, que toma como referencia los arcos de los dinteles de las ventanas para diseñar un espacio cubierto con bóvedas catalanas y acristalado. Este nuevo espacio tendrá aproximadamente 50 metros cuadrados y servirá como área multiusos. Además, se llevará a cabo una reurbanización completa del entorno y se realzará la cara norte del edificio, que mira hacia el río.