Juan Diego Montañés, ha renunciado a la dirección de esta área por la "elevada carga de trabajo".
La fiscal jefe de Castellón respaldó la renuncia, elevando el caso a la Fiscalía General del Estado, que tras revisar la situación, consideró que se cumplían los requisitos para proceder con el cese de Montañés en este ámbito.
La solicitud de cese, formalizada el pasado 10 de septiembre, fue aceptada vía decreto del 27 de septiembre por el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y se ha hecho oficial con su publicación en el Boletín Oficial del Estado este miércoles.
El fiscal delegado de delitos de odio de Castellón, Juan Diego Montañés, ha presentado su renuncia a la dirección de esta área debido a la «elevada carga de trabajo».
Montañés, quien fue nombrado fiscal delegado de delitos informáticos en noviembre de 2011, asumió en 2013 funciones adicionales relacionadas con la tutela penal de la igualdad y la lucha contra la discriminación. No obstante, a lo largo de los años, su carga de trabajo ha aumentado considerablemente.
Además de ser delegado de delitos informáticos, es responsable del Sistema de Información del Ministerio Fiscal (SIMF) y coordina la implementación del expediente judicial en la Comunitat Valenciana. Estas responsabilidades han dificultado su capacidad para continuar liderando la delegación en materia de delitos de odio.
Según la resolución de su cese, el cargo de Montañés exigía una dedicación que «le dificulta continuar asumiendo la delegación de la especialidad en delitos de odio y contra la discriminación».
