Diputación ha lanzado una subvención para municipios con menos de 3.000 habitantes, destinada a contratar guardas rurales y prevenir robos en las áreas agrícolas.
El Ayuntamiento de Sant Jordi se ha comprometido a participar en la convocatoria recientemente aprobada por la Diputación Provincial de Castellón. Esta iniciativa tiene como objetivo permitir la contratación de personal adicional de seguridad con el fin de prevenir los robos que ocurren anualmente en las zonas rurales. La presidenta Marta Barrachina anunció esta medida esta semana, una demanda largamente solicitada por el alcalde Iván Sánchez Cifre.
La Diputación Provincial de Castellón ha anunciado una subvención dirigida a municipios con menos de 3.000 habitantes para contratar guardas rurales y así evitar los robos en el campo.
Esta ayuda, que asciende a 200.000 euros, está específicamente destinada a municipios que carecen de servicio de vigilancia y donde más del 30% de su superficie está dedicada a la agricultura.
Con esta convocatoria de subvenciones, la Diputación pretende fortalecer la vigilancia, inspección y control en las áreas rurales de la provincia de Castellón.
Iván Sánchez Cifre ha expresado su agradecimiento a la presidenta por la inversión de 200.000 euros para establecer un servicio que ha estado solicitando durante mucho tiempo.
En Sant Jordi estamos realizando un esfuerzo considerable para evitar robos en nuestro campo, especialmente durante la fase de recogida de la algarroba.
Destacó Sánchez Cifre. Añadió que ya había solicitado al anterior presidente de la Diputación ayuda para los pueblos en esta situación, y que es significativo que la nueva presidenta haya mostrado esta sensibilidad, lo que reforzará el trabajo preventivo que ya se estaba llevando a cabo.
Cabe destacar que el guardia municipal de Sant Jordi realiza cada campaña acciones dirigidas a prevenir robos y detener a las personas que cometen estos delitos en los campos del municipio. Normalmente, coordina estas tareas de vigilancia en colaboración con la Policía de Vinaròs y Cálig, así como con los operativos del Grupo Roca de la Guardia Civil.
Sant Jordi, un municipio pionero de vigilancia con drones para evitar robos
Es importante destacar que el Ayuntamiento de Sant Jordi ha estado realizando un intenso trabajo de vigilancia, respondiendo a las necesidades de los agricultores y vecinos del municipio. Estos se han visto afectados por la reducción de sus fuentes de ingresos en un contexto donde los recursos en las áreas rurales son escasos. Esta labor, dirigida a garantizar la seguridad en todo el municipio, cobra especial relevancia durante la temporada de recogida de la algarroba, un fruto que ha aumentado su valor gracias a sus nuevas aplicaciones.
Iván Sánchez Cifre ha lamentado repetidamente,
Hasta ahora, prácticamente hemos tenido que llevar a cabo este trabajo solos desde los propios ayuntamientos debido a la falta de recursos proporcionados por la Subdelegación del Gobierno. Además, la Diputación Provincial se negó hace dos años a crear una plantilla de guardias rurales o una línea de ayudas para mejorar la seguridad en los pueblos del interior de la provincia, dejando así desprotegidos a nuestros vecinos y agricultores.
Hace dos años, el alcalde de Sant Jordi tomó la iniciativa de reforzar las medidas de seguridad para prevenir robos, capacitando al guardia rural del pueblo en videovigilancia aérea y adquiriendo un dron para mejorar las tareas de vigilancia en todo el término municipal. Esta estrategia ha dado resultados positivos, permitiendo realizar varias detenciones in situ.
Iván Sánchez Cifre ha afirmado que “la seguridad es fundamental para garantizar la calidad de vida en cualquier pueblo y rentabilizar las explotaciones agrícolas de nuestros vecinos. Además, Sant Jordi es un municipio con una producción significativa de algarrobas, cuyo valor ha aumentado en los últimos años gracias a sus múltiples aplicaciones en la alimentación y la cosmética. Nos enfrentamos a una desventaja debido a que nuestras explotaciones agrícolas están muy dispersas y las fuerzas de seguridad se encuentran a mayor distancia en comparación con las poblaciones costeras”.
El guarda rural está casi plenamente dedicado a la vigilancia
Hace tres años, el alcalde de Sant Jordi decidió intensificar el trabajo de vigilancia en todo el término municipal para ayudar a prevenir los robos de algarrobas en las fincas del pueblo. En ese momento, el alcalde Iván Sánchez Cifre asignó el horario del guarda rural exclusivamente a labores de vigilancia.
Desde hace cuatro años, el Ayuntamiento de Sant Jordi ha estado colaborando estrechamente para combatir el incremento de robos de algarrobas que afecta a los productores del municipio. En colaboración con la Sociedad de Cazadores y el guarda rural, se han realizado numerosas incautaciones de este producto. Desde 2020, el precio de la algarroba ha aumentado significativamente debido a la crisis y la falta de producción frente a la creciente demanda.