Se han decomisado 12 toneladas de hojas de tabaco y más de 700.000 paquetes de cigarrillos, con un valor aproximado de casi 5 millones de euros.
El teniente de la Guardia Civil en Oliva, municipio de la provincia de Valencia, ha sido arrestado en una operación en contra del contrabando de tabaco a gran escala, junto a otros veinte detenidos, en su mayoría de origen búlgaro.
Un grupo de agentes de la Guardia Civil, bajo el mando de una unidad en Madrid, llevó a cabo la detención de 17 personas que trabajaban ilegalmente en una nave en Oliva. Asimismo, los efectivos de la Benemérita realizaron registros en algunos domicilios de Barcelona. Durante el operativo en la fábrica, se encontraron miles de cajetillas de tabaco ilegal listas para ser distribuidas en toda España desde Oliva. También se llevaron a cabo registros en viviendas en Gandía, Altea y Villagarcía de Arosa, en Pontevedra.
Actualmente se está investigando si esta organización criminal exportaba su tabaco fuera de España y si hay más personas involucradas en esta actividad delictiva. Las fuentes consultadas indican que la nave se encontraba en el Polígono Jovades, donde trataban de pasar desapercibidos.
Fuentes de la Guardia Civil confirmaron que la operación fue llevada a cabo de manera conjunta por agentes de la Comandancia de Valencia y la Unidad Central Operativa, es decir, por agentes compañeros del propio teniente.
Los investigadores creen que el teniente arrestado era miembro de una organización criminal enfocada en la producción ilegal de tabaco, la cual operaba desde un polígono industrial en esta localidad costera de Valencia. Durante la operación, se han decomisado más de 770.000 paquetes de cigarrillos de distintas marcas falsificadas y alrededor de 12 toneladas de hojas de tabaco.
La capacidad productiva de este grupo delictivo era de un contenedor cada 5 días, con un valor estimado de venta de 2 millones de euros por contenedor. El valor estimado de los productos incautados asciende a unos cinco millones de euros.
Por otro lado, en el cuartel de Oliva, se ha revelado este jueves que la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia ha activado el protocolo de acoso laboral tras la denuncia presentada por una agente del puesto de Oliva. La agente afirma haber sido víctima de hostigamiento personal y profesional durante años y estar en tratamiento psicológico debido a estos hechos. El teniente de la Guardia Civil de esta localidad, detenido por contrabando, es el acusado de acoso.
Fuentes cercanas de la Comandancia han informado que este protocolo se activó en cuanto se tuvo conocimiento de los hechos denunciados. Se espera una investigación interna para determinar la posible adopción de medidas disciplinarias adicionales.
Un compañero de la agente afectada afirma haber enviado un escrito a la directora general de la Guardia Civil detallando los cargos de dos superiores, presuntos responsables del acoso.
Cabe mencionar que, en noviembre pasado, el Tribunal Militar Central confirmó la suspensión por tres meses de dos guardias civiles destinados en el puesto de Gandia-Oliva (Valencia) por ser responsables de una falta muy grave de acoso a una compañera.
Esta suspensión se debió a hechos ocurridos en abril de 2021, cuando la agente patrullaba de noche con los dos procesados y fue objeto, según la sentencia, de varias expresiones vejatorias. Las mismas fuentes no han especificado si ambos casos tienen alguna relación.