El sismo ocurrió a las 10.44 de la mañana (18.44 GMT) a una profundidad de 10 kilómetros en el noroeste de Petrolia, una pequeña ciudad ubicada en el condado de Humboldt.
Un potente terremoto de magnitud 7,0 ha sacudido este jueves las costas del norte de California, generando una alerta de tsunami que se extiende hasta el estado de Oregón, según ha informado el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El sismo ocurrió a las 10.44 de la mañana (18.44 GMT) a una profundidad de 10 kilómetros en el noroeste de Petrolia, una pequeña ciudad ubicada en el condado de Humboldt. Tres minutos después del terremoto principal, se produjo una réplica de magnitud 5,8 a unos 9 kilómetros de Cobb, en el norte de California. Posteriormente, se registraron otras tres réplicas de menor magnitud: 3,3, 3,7 y 4,2, según los datos proporcionados por el USGS.
En un primer momento, el USGS clasificó la magnitud del sismo en 6,6, pero más tarde la elevó a 7,0. Tras el terremoto, las autoridades emitieron una alerta de tsunami para las zonas costeras del norte de California y el centro de Oregón, afectando a aproximadamente 4,7 millones de personas que residen en la región.
Los residentes de la zona de la Bahía de San Francisco recibieron alertas de tsunami y fueron instados a estar atentos a posibles órdenes de evacuación. Mientras tanto, las autoridades están evaluando la situación y han recomendado a los residentes que permanezcan alertas a posibles réplicas. Hasta el momento, no se han reportado víctimas ni daños graves.
El condado de Humboldt, situado al norte de San Francisco, ha sufrido cortes de electricidad, afectando a aproximadamente 19.000 clientes, según los datos de PowerOutage.us. El sismo también ha generado una importante preocupación por posibles tsunamis, lo que ha llevado a las autoridades a emitir la alerta. En un comunicado del Centro de Advertencia de Tsunamis del Servicio Meteorológico Nacional, se indicó: «En base a los parámetros preliminares del terremoto, es posible que se produzcan tsunamis peligrosos en las costas situadas a menos de 300 kilómetros del epicentro del sismo».
Aunque aún no se han reportado olas en la zona, la advertencia sigue en pie, y cualquier persona cercana a la costa ha sido instada a estar alerta ante el posible peligro. Las autoridades continúan monitoreando la situación mientras se evalúan las posibles consecuencias de este terremoto y las réplicas subsecuentes.
