Más de la mitad de tiburones y rayas en el Mediterráneo están en peligro de extinción debido a la pesca, cambio climático y contaminación, según investigación.
Un equipo de investigadores del Institut Cavanilles de la Universitat de València (UV), el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC y la ONG Catsharks ha concluido que más del 50% de los tiburones y rayas en el Mediterráneo están en riesgo de extinción debido a la presión pesquera, el cambio climático y la contaminación. El trabajo, que forma parte del proyecto ECEME de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y que ha sido cofinanciado por esta entidad, aporta nuevos datos sobre la situación de estas especies cuya conservación es esencial para el funcionamiento de los ecosistemas marinos.
Los tiburones y rayas, también conocidos como elasmobranquios o peces de esqueleto cartilaginoso, tienen un papel crucial en la regulación de los ecosistemas marinos, ya que controlan las poblaciones de sus presas y mantienen el equilibrio de los mares y océanos. Sin embargo, debido a su lento crecimiento, madurez tardía y escasa descendencia, son muy vulnerables ante las actividades humanas.
La presión pesquera es su principal amenaza, ya que aunque no son el objetivo de las pesquerías mediterráneas, se capturan de manera accesoria y accidental. Por lo tanto, se hace necesario un mejor manejo y gestión de sus poblaciones para asegurar su subsistencia. En este sentido, el proyecto se ha centrado en evaluar la abundancia y distribución de los tiburones y rayas del Mediterráneo español a través de datos pesqueros obtenidos desde programas de observación a bordo.
El último trabajo de investigación, publicado recientemente en la revista ‘Frontiers’ por este equipo, ha descrito la abundancia de cada una de las especies de tiburones y rayas en las zonas de pesca de arrastre de fondo del Mediterráneo español y la manera en la que interaccionan con el arrastre de fondo. Esta información ha permitido comprender cómo los factores ambientales y la presión pesquera afectan de manera combinada a la comunidad de elasmobranquios, que cambia en función de condiciones como la profundidad, la temperatura del fondo y el tipo de sustrato.
«Entender cómo cambia la comunidad con las condiciones climáticas y ambientales nos permite predecir mejor los posibles impactos del cambio climático y la destrucción del hábitat con el fin de establecer prioridades para su conservación», explica David Ruiz-García, primer firmante del estudio.
Influencia de la pesca en la población y diversidad marina
Los investigadores han señalado que el esfuerzo pesquero tiene un papel fundamental en la modificación de la comunidad de elasmobranquios: en las zonas con mayor frecuencia pesquera disminuyen significativamente las poblaciones y la diversidad de tiburones y rayas. De hecho, la composición de la comunidad de elasmobranquios ha experimentado cambios notables desde la década de 1950.
En aquel entonces, algunas de las especies locales estaban capturadas con regularidad, incluyendo tiburones como la mielga, el alitán o el angelote. Sin embargo, otras especies como la pintarroja se están volviendo cada vez más abundantes en la zona.
Estas especies parecen ser capaces de soportar los efectos de las actividades humanas, gracias a su rápida y prolífica reproducción. Ahora nos estamos dirigiendo hacia un ecosistema menos diverso, más simple, menos productivo y menos capaz de asumir los cambios que pueden producirse en el futuro debido al cambio global.
Explica el investigador de la UV.
Ante la necesidad de continuar monitoreando las poblaciones de tiburones y rayas en el Mediterráneo para su conservación, el proyecto ECEME promueve la creación de planes de gestión para la conservación de elasmobranquios en el Mediterráneo y medidas de concienciación y colaboración hacia el sector pesquero. Según ellos, es esencial que el sector sea capaz de identificar adecuadamente las especies de elasmobranquios protegidas y manejar correctamente estos especímenes cuando se encuentran a bordo para asegurar su supervivencia tras la captura.