El oportunista, adevenedizo y espabilado Carlos Latre será nombrado Hijo Predilecto de la Ciudad de Castellón.
En el año 2008 la Asociación Caballeros Templarios de Castellón invitó a Carlos Latre a ser pregonero de la Nit Templaria. Por boca de su representante se contestó que sí, pero si pagaban 15.000 euros. 15 años después de mercadear con Castellón, el famoso humorista e imitador se convertirá en Hijo Predilecto de la capital de la Plana.
Durante este tiempo ha ganado, seguro, mucho más de 15.000 euros, muchísimo más, y a lo mejor ese día del no a los Templarios pergeñó la idea de que si digo constantemente que soy castellonero y del Club Deportivo Castellón ganaré aún más dinero. No voy a poner en duda los méritos artísticos del grauero, sí cuestiono el sentimiento de amor y dedicación a su ciudad natal, reducida a repetir su lugar de nacimiento y hacerse unas fotos en un “almuercito” en Les Planes, aunque en una sociedad líquida y fatua como la actual a lo mejor es suficiente.
Un personaje ideal, que tampoco es Castellón pata negra, como caldo de cultivo de ese Camelot del todo bonito y que bien nos lo pasamos en que se ha convertido el Ayuntamiento de Castellón en un ejercicio de snobismo supremacista y paternalismo exacerbado que considera ignorantes a los ciudadanos.
¿Cómo es posible que tanto Vox -y su remilgado y de recto proceder portavoz, Antonio Ortolá-, como el PSOE -todavía noqueado por su derrota-, o Compromís, -tan purista en la defensa de lo nuestro-, hayan aceptado el nombramiento de Hijo Predilectode un Latre que no es más que un arribista, advenedizo, oportunista y espabilado? ¿Cuánto cobró el gracioso por ser Voladoretd’Or y Gaiater de l’Any?
A lo mejor me equivoco y el donairoso imitador se convierte en el Antonio Banderas de Málaga para Castellón y nos construye un teatro, subvenciona un ‘stage’ para jóvenes cómicos, lleva las gaiatas a sus espectáculos para promocionarlas y consigue convertir a Castellón en capital internacional de las varietés.
La verdad es que se me hace difícil asimilar que el salón de plenos del Ayuntamiento se convierta el viernes en un festival del humor, bajo la adusta mirada de los predecesores del ocurrente cómico (Francisco Michavila, Bernat Artola, Herrero Tejedor, Matilde Salvador, Leandro Alloza, Miquel Peris…), que seguro no sabe quienes son, y que ellos sí amaban a nuestra ciudad y la llevaban en el alma.
Es Toledo. No Castellón.
Vicente Cornelles Castelló
Escritor y periodista