Consideran que el proyecto es "un ataque serio a las comarcas de Castellón, especialmente a los términos de Les Coves de Vinromà y Benlloch."
La diputada Marisa Saavedra, representante de Unidas Podemos en el Congreso por Castellón, ha pedido al Ministerio para la Transición Ecológica y el Desafío Demográfico que rechace el proyecto de macroplantas fotovoltaicas de MAGDA. Ella considera que la declaración de impacto ambiental favorable al proyecto es un ataque serio a las comarcas de Castellón, especialmente a los términos de Les Coves de Vinromà y Benlloch. Además, ha solicitado una reunión con el Ministerio de Transición Ecológica.
Según Saavedra, la Declaración de Impacto Ambiental está redactada con un supuesto lenguaje técnico, pero no considera el impacto real de la macroplanta en la vida y la economía de los habitantes de los pueblos. La diputada afirma que la ocupación de 450 hectáreas, mayoritariamente de producción agrícola, afectará negativamente la economía compleja que da trabajo directo e indirecto a gran parte de la población, y no se menciona esto en la declaración.
La diputada de Unidas Podemos, Marisa Saavedra ha señalado,
Incluso cuando el informe hace mención a la afectación a la salud, solo trata sobre el polvo y el ruido que puedan producirse durante la construcción, pero no menciona los posibles efectos negativos sobre la salud mental de las personas ni sobre una sociedad rural que ha logrado vivir bien gracias a su trabajo en su tierra.
Además, la diputada ha resaltado que «es una empresa ajena a los propietarios de los terrenos la que se arroga el derecho a decidir sobre ellos sin tener en cuenta sus necesidades y demandas o problemas».
«Este modelo de desarrollo copia el de la burbuja inmobiliaria en tanto que lesiona la capacidad de decisión de los afectados y destruye el territorio. Además, está impulsado por una lógica especulativa y aprovecha los beneficios, que no se benefician a la población local. Los daños personales y sociales relacionados con este proyecto son considerables», agregó.
La diputada se cuestiona si sería sensato construir una macroplanta fotovoltaica en el Parque del Retiro y la Pradera de San Isidro de Madrid, áreas que tienen una superficie similar a la que será ocupada por MAGDA, sin tener en cuenta el impacto social que esos terrenos tienen y afirmando que no afectaría a la vegetación natural.
Marisa Saavedra ha afirmado que la Declaración de Impacto Ambiental favorable a la macroplanta MAGDA es inadmisible y desde Unidas Podemos seguirán luchando para que los vecinos de les Coves de Vinromà y Benlloch tengan la capacidad de decidir sobre sus tierras, su trabajo y su futuro. Seguirán trabajando junto a las plataformas ciudadanas y colectivos por una transición ecológica justa y democrática.
