El TAU Castelló hizo historia al derrotar al Movistar Estudiantes por 87-88, logrando así su primera victoria contra uno de los clásicos del baloncesto español.
El partido contra el Movistar Estudiantes fue aún más emocionante que la victoria hace unas semanas contra el Zunder Palencia. A pesar de un flojo primer cuarto, el equipo local del Ciutat de Castelló logró una impresionante remontada y culminó el juego con un triple de Alvarado a dos décimas del final para obtener la victoria. La afición local no podría estar más contenta y orgullosa de su equipo, que ha ganado 8 de sus últimos 10 partidos.
El TAU tuvo un comienzo difícil contra el Movistar Estudiantes. Defendieron mal, permitieron rebotes y perdieron balones. En solo un minuto y medio, el entrenador Orenga solicitó un tiempo muerto cuando el marcador estaba 0-6 en contra. Afortunadamente, después del descanso, los locales anotaron dos triples seguidos y aumentaron la intensidad en la defensa. Sin embargo, tenían problemas para detener al pívot visitante Larsen, quien anotó 6 puntos en menos de 5 minutos. Hughes y Leimanis de los Estudiantes también anotaron desde el perímetro, mientras que los locales no tuvieron mucho acierto al tirar triples tras bote o bloqueo directo.
La situación se volvió bastante difícil (8-22, min. 7), por lo que el equipo local intentó con una formación más ligera (Stutz y Bilbao de interiores) y con Faner liderando el ataque. El TAU estaba atascado en el ataque, aunque al final del primer periodo, anotaron algunos puntos desde la línea de personal y con una decidida penetración de Faner. No obstante, los jugadores de Madrid seguían anotando con facilidad, especialmente Atencia, quien lograba puntos de todas las maneras. El primer cuarto terminó con un marcador de 15-32 a favor de los visitantes.
Con la inclusión de Soumbey Alley en la pista, el TAU encontró una nueva forma de hacer daño a su rival con penetraciones hacia el aro. Además, el equipo presionó en defensa, controlando un buen número de rebotes, gracias principalmente a Jorge Bilbao. Stutz destacó en el juego y las transiciones ganaron velocidad. De este modo, en 5 minutos, los azulejeros lograron un gran parcial de 12-4, con lo que el marcador reflejaba un resultado más esperanzador de 28-36 en el ecuador de este periodo.
El conjunto madrileño se mantuvo gracias a la calidad de su gran estrella y máximo anotador, Leimanis, mientras que los locales fueron cada vez más colectivos y certeros desde más allá de la línea de 6,75. Dos espectaculares triples seguidos de Alvarado y una canasta de pillo de Stutz pusieron nervioso al entrenador estudiantil, que tuvo que agotar sus tiempos muertos cuando su adversario le echaba el aliento encima al borde del descanso (38-41). Por lo tanto, el segundo cuarto fue claramente favorable a los discípulos de Orenga (25-11), y había un nuevo partido por delante.Tras el descanso, el Movistar Estudiantes demostró de nuevo que tiene opciones cuando se encuentra en apuros.
En esta ocasión, fue Hughes el responsable de que los madrileños volvieran a abrir brecha (43-51, min. 24), pero tres triples seguidos de los castellonenses volvieron a apretar la situación en poco más de un minuto. El TAU no era el vendaval ofensivo del segundo cuarto, pero sus variantes defensivas le permitieron controlar a los madrileños y que el encuentro siguiera muy nivelado. Los de Orenga remaban y fruto de ello llegó la culminación de la remontada, cuando al fin se pusieron por delante al acabar este tercer periodo (60-59). El parcial del cuarto volvió a ser para los locales (20-16), siendo la única mala noticia la temprana cuarta falta de Bilbao, que estaba siendo un importante valladar.
La recta final del partido fue de máxima tensión. El TAU continuó haciendo daño con los triples, llegando a tener 10 convertidos en su cuenta en el minuto 34, pero la igualdad máxima se mantenía, ya que los madrileños tenían toda su artillería en pista y arañaban puntos con las pequeñas concesiones que les daban los azulejeros. Tras una serie de ataques desacertados de los locales, Orenga tuvo que pedir tiempo muerto por una pequeña ruptura que provocaron los visitantes (70-76, min. 36). Con esfuerzo y tesón, los de La Plana lograron empatar el partido a 79 puntos a 1:45 del final.
Un triple de Hughes (su punto 23) hizo daño, pero la respuesta fue una canasta de Alvarado, replicada por otra de Leimanis. Con 42 segundos por jugar, el marcador era 81-84, pero apareció un inconmensurable Stutz para empatar con un triplazo (el 13º del equipo) a 20 segundos del final. Los de La Plana decidieron hacer falta para tener la última posesión. Leimanis convirtió los dos tiros libres, pero un indescriptible, alucinante, apoteósico triple desde la esquina de Alvarado (para quitarse el sombrero por su partido) a tan solo dos décimas del final certificaron este histórico y merecido triunfo del TAU Castelló que se recordará por mucho tiempo y que hizo vibrar a la afición del Ciutat como en las grandes ocasiones.