Se incautaron 1.592 plantas de marihuana, 2 armas de fuego y 2 vehículos de alta gama.
La Guardia Civil ha desarticulado una banda delictiva dedicada al cultivo de marihuana tipo indoor y su posterior envío a países europeos, con la detención de nueve personas. Ocho de los miembros han sido enviados a prisión por orden del juzgado.
Estos arrestos se llevaron a cabo en el marco de la operación Miller, de alcance nacional, que se enmarca dentro del Plan de respuesta policial al cultivo y tráfico ilegal de marihuana y sus beneficios. La operación recibió el nombre de Florenpapa-Scouts.
Las investigaciones se iniciaron en diciembre del año pasado, cuando la Guardia Civil recibió información sobre la presencia de una organización criminal de origen albanés que se dedicaba al cultivo de marihuana en interiores en la provincia de Alicante.
Para confirmar la información obtenida, los Puestos Principales de la Guardia Civil de Ibi y Altea trabajaron de forma conjunta y pusieron en marcha la operación Florenpapa-Scouts.
En una primera fase, se localizaron tres plantaciones de marihuana en chalets situados en zonas exclusivas de Altea, Castalla y Alicante, donde los delincuentes intentaban pasar desapercibidos. Después de minuciosas vigilancias, los agentes lograron identificar a los miembros del grupo criminal y desentrañar sus roles y funciones.
El primer nivel de la banda estaba compuesto por un tío y su sobrino, ambos de origen albanés y considerados los líderes del grupo. Además, ambos estaban sujetos a una Orden Europea de Detención y Extradición (OEDE) emitida por las autoridades judiciales italianas por hechos similares. Bajo su mando, había cinco hombres encargados de vigilar y proteger las plantaciones, asegurando la seguridad ante posibles robos de otras bandas. Otros dos individuos se ocupaban de las tareas logísticas.
Una vez que los agentes pudieron vincular a todos los investigados con el cultivo de la droga, el pasado 25 de junio, con el apoyo del Puesto de Sax y de las Unidades de Seguridad Ciudadana (Usecic) de Alicante y Torrevieja, se llevó a cabo la operación, según detalla el Instituto Armado.
SE REALIZAN REGISTROS SIMULTANEOS
Durante los registros simultáneos realizados en Alicante, Altea y Castalla, la organización criminal fue desmantelada con éxito. Se detuvo a 9 hombres de diferentes nacionalidades: albanesa, griega e italiana, cuyas edades oscilaban entre los 21 y los 58 años. Durante las operaciones, se incautaron 2 armas de fuego, 1.592 plantas de marihuana, 1.005 euros en efectivo, material utilizado para el cultivo y 2 vehículos de alta gama.
En las viviendas donde operaba la banda, los delincuentes habían realizado conexiones ilegales a la red eléctrica para hacer más eficientes y rentables las plantaciones, generando un perjuicio económico de 196.782 euros a las compañías eléctricas.
En el momento de las detenciones, uno de los líderes intentó huir por un balcón, pero finalmente fue capturado por los agentes en la terraza de una vivienda cercana.
Los detenidos han sido acusados de diversos delitos, según su grado de participación, entre ellos tráfico y cultivo de droga, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico, blanqueo de capitales y pertenencia a una organización criminal.
Tras las detenciones, los sospechosos, junto con las pruebas obtenidas, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción nº 2 de Ibi, que decretó el ingreso en prisión de ocho miembros de la banda, incluyendo a los dos líderes.
Estas acciones se enmarcan en la operación Miller, de alcance nacional, que forma parte del ‘Plan de respuesta policial al cultivo y tráfico ilegal de marihuana y sus beneficios’, llevado a cabo por la Guardia Civil para combatir el tráfico de drogas.
