El pueblo de Vilafamés ha vivido un fin de semana lleno de tradiciones, con las festividades en honor a su patrón local al cierre de septiembre.
Este año, la celebración de Sant Miquel de Veremes destacó nuevamente por la alta participación en los eventos organizados en la ermita, que fue el epicentro de la festividad. El paraje natural de El Mollet, donde se ubica el ermitorio, acogió el domingo los actos principales, que incluyeron un popular almuerzo a base de sardina, huevo y pimiento, y una comida de confraternización con una paella monumental.
Los actos de Sant Miquel de Veremes estuvieron acompañados por el sonido de tambores y bombos, gracias al Grup de Bombos i Tambors de la asociación Amics de l’Ermita de Sant Miquel. Este grupo marcó el inicio de las fiestas el viernes por la tarde con un pasacalle por las calles del pueblo hasta el polideportivo l’Estepar, y también clausuró los festejos el domingo por la tarde con una actuación en el ermitorio ante cientos de personas que se congregaron después de la paella.
Las tradiciones ocuparon un lugar central en el fin de semana, sin dejar de lado la diversión. El viernes por la noche, el polideportivo l’Estepar fue escenario de una cena de ‘tombet’ con música en directo para amenizar la noche, mientras que el sábado por la mañana se organizó un parque de actividades infantiles en la plaza Hermanas Mas, brindando entretenimiento a los más pequeños.
