A vueltas con «Les Retallades»… ¡Cansinos!

A vueltas con «Les Retallades»… ¡Cansinos!

La habilidad de la izquierda y sus portavoces mediáticos para cambiar la terminología de “retallades” por “ajustes presupuestarios” fue pasmosa.

 

Volvemos a escuchar en las redes sociales, medios de comunicación y a algún periodista de postín la palabra “retallades”,  haciendo referencia a los problemas que se plantean en este momento en la Sanidad Valenciana.

Y es cierto que dichos problemas existen y se tendrán que resolver cuanto antes, porque la ciudadanía lo merece y necesita. Pero también lo es que, a día de hoy, sigue sin solucionarse el problema de la financiación autonómica, a excepción de Cataluña, por vergonzante transacción político-comercial entre el PSOE y Esquerra Republicana de Catalunya y para el País Vasco por una increíble negociación constitucional, que a día de hoy mantiene la desigualdad entre todos los españoles.

“Recortes” fue la piedra angular sobre la que la izquierda valenciana construyo su discurso para derrotar al PP de Alberto Fabra. En cualquier lugar, centros administrativos, hospitales y colegios públicos, pudimos “admirar” los pasquines con el RETALLADES NO.

Funcionó bien para ellos y les dio la posibilidad de “arreglarlo”.

Pues no, los ocho años de Ximo Puig y Monica Oltra, solo sirvieron para agravar la situación y dejar el legado que ahora los voceros de izquierdas pretenden se solucione en un año. Pero para ellos no eran “Retallades” se habían transformado en necesarios “ajustes presupuestarios”. Eso sí, acompañados de una nefasta gestión.

Hoy no podemos eludir la responsabilidad de gobierno, que por eso y para eso la concede el pueblo en las elecciones. Ni escudarnos en el desconocimiento porque el trabajo de la oposición es fiscalizar la gestión del gobierno y el PP, conocía  o debía conocer perfectamente los presupuestos anuales del Govern de la Generalitat y su gestión en los últimos ocho años. Aunque la “maleza” fue de tal magnitud, que se necesitaran más de una anualidad para solucionarla.

Como la estrategia electoral del 2015 salió bien, piensa la izquierda, totalmente “desmantelada” por los desatinos de Pedro Sánchez, que volver a las viejas terminologías pueden darles alguna oportunidad. iQue equivocados están!

Por primera vez y en referencia a este tema, ayer en una tertulia, hoy la palabra “cansinos”. ¡Qué acertado estuvo el comentario!

Insistían los interlocutores, en la facilidad que tuvieron los comunicadores de izquierdas, en sustituir la palabra “retallades” por “ajustes presupuestarios”. ¡Qué razón!

La sociedad Valenciana, acaba de vivir ocho años de desgobierno y despropósitos de la coalición social-comunista y seguro que le cuesta olvidar, eso sí, si el actual Gobierno lo hace bien. Personalmente estoy convencido de que Carlos Mazón en Valencia, Marta Barrachina en la provincia y Begoña Carrasco en Castellón capital, lo están haciendo bien y aún lo harán mejor.

En estos momentos estamos viviendo una situación que de confirmarse, agravara el problema.

Aceptar la nueva propuestas de los catalanes, obliga a  que los presupuestos del resto de Autonomías se vea gravemente afectados. Esta es la gran solución que da la izquierda; más impuestos, más gasto público innecesario y “recortes presupuestarios”(solo para algunos) en cuestiones fundamentales, “ les retallades”.

Las redes sociales, los medios afines y los periodistas fieles al Sanchismo podrán intentar cambiar la realidad dirigiendo el foco del disgusto social hacia los que hoy gobiernan nuestra Comunidad Valenciana. Pero la realidad es persistente e insistente y es la que es, por mucho que se empeñen en tergiversarla.

Las cosas son como son y en nuestra ciudad, durante ocho años de mandato, Ximo Puig se limitó a finalizar un colegio.

Y en Sanidad a “destrozar” lo ya hecho, con la desvergüenza de proponer un nuevo Hospital General en sus últimos días y sin dotarlo de un solo euro en los presupuestos de la Generalitat, ese fue el legado ¿RETALLADES?

Ahora después de un año, ya se exigen altas responsabilidades a los nuevos gobiernos de Carlos Mazón y Begoña Carrasco. Los defensores del Social-Comunismo están en su derecho, pero con la mentira y los “cambios de opinión” no se va a ninguna parte.

El intento de la izquierda y sus portavoces mediáticos para cambiar la terminología de “retallades” utilizada como arma electoral contra el centro derecha, por la de “ajustes presupuestarios” utilizado como justificación de la falta de inversiones en nuestra provincia y capital, fue sorprendente.

Pero la realidad es la que es y, a día de hoy, pese a la injusta e insuficiente financiación por parte del Estado, se está trabajando ya con los pies en el suelo y eficaz gestión en toda una serie de inversiones, incluidas (esta vez sí) en los Presupuestos de la Generalitat que a lo largo de esta legislatura se verán materializadas.

Miguel Ángel Mulet i Taló