Ofrece el espacio a la Conselleria de Agricultura de cara a la campaña citrícola
El Ayuntamiento de Almassora ha preparado el albergue de Santa Quitèria como espacio libre de coronavirus de cara a la campaña de recogida de cítricos y a la llegada de temporeros. Este edificio público cumple la normativa de seguridad para poder reservarlo como zona de aislamiento en caso de detectar positivos por COVID-19 entre trabajadores del campo que carezcan de una vivienda en la que aislarse.
Así se lo ha transmitido la alcaldesa de Almassora, Merche Galí, a la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, durante una visita al albergue para mostrarle de primera mano las condiciones del inmueble, “que cuenta con todas las habitaciones disponibles y cuartos de baño segregados por sexos, así como agua corriente, electricidad y un amplio espacio exterior que serviría como zona de tránsito para entregar alimentos”.
Galí ha incidido en que los preparativos del albergue responden a la voluntad del consistorio de adelantarse a un posible brote de carácter laboral durante las jornadas de trabajo en los campos de cultivo de Almassora y municipios cercanos. La reserva de este edificio como centro de aislamiento permitiría alojar a las personas encargadas de la recolección de la naranja que carecen de una vivienda con medidas de seguridad óptima.
La consellera de Agricultura valoró positivamente las condiciones del albergue de Almassora que, como otras localidades de la zona, inician en estas fechas la recogida de la naranja con la contratación de trabajadores llegados desde otros puntos. Tal como le trasladó la alcaldesa, el albergue, enclavado en el paraje natural de Santa Quitèria, cumpliría las medidas higiénicas precisas para el aislamiento temporal de personas enfermas.
Cabe recordar que los operarios del Servicio Municipal de Mantenimiento y Logística (SMML) pusieron a punto el edificio antes del verano para la celebración de la Escola d’Estiu. Pese a que los monitores aprovecharon el buen tiempo para llevar a cabo todas las actividades al aire libre, la localidad preparó el mobiliario interior por si era necesario aislar a algún menor o cuidador durante la estancia en el paraje, situación que no se produjo.
En la actualidad, el edificio vuelve a estar disponible, en este caso para alojar a recolectores de la naranja. Al respecto, la consellera de Agricultura ha indicado que la prestación de estos espacios “garantiza el aislamiento en condiciones dignas para cumplir con todos los protocolos de seguridad y contener la propagación del virus”, además de destacar “el comportamiento ejemplar del campo de la Comunitat Valenciana” desde que se decretara el Estado de Alarma. Ambas instituciones se han comprometido a coordinarse en caso de que sea necesario abrir el albergue de Almassora por un brote o caso específico de coronavirus.
