La localidad proyecta la penúltima fase del vial que transcurre desde Tasio hasta la avenida Frares y que aliviará el flujo de la Gran Avenida
El equipo de gobierno de Benicàssim sigue avanzando en la prolongación de la CV-149, con la adquisición de 11.000 metros cuadrados necesarios para llevar a cabo la penúltima fase del proyecto, que tiene como objetivo conectar directamente la capital con el centro urbano de Benicàssim. Esta iniciativa, considerada prioritaria por el equipo liderado por Susana Marqués, continúa con la meta de «vertebrar el territorio y descongestionar la Gran Avenida Jaime I y la N-340, mejorando la seguridad y la movilidad de los residentes y visitantes de Benicàssim«, según ha destacado la alcaldesa.
De esta manera, Benicàssim avanza en la ejecución de la penúltima fase de la prolongación de la CV-149, una autovía que une Castelló con la zona sur del municipio y que finalmente se conectará con el casco urbano. Esta fase abarca desde Mohíno hasta Tasio, extendiéndose ahora hasta Frares. «El vial tendrá un ancho de 25 metros, con dos carriles, amplias aceras cercanas a las viviendas, zona de aparcamiento y carril bici«, ha explicado Carlos Díaz, concejal de Urbanismo.
Se trata de una solución provisional hasta que se desarrollen los sectores 3 y 4, momento en que se ampliará el vial, el cual contará finalmente con doble carril de circulación por sentido, igual que el resto de la CV-149. Entre las obras previstas, se incluye la demolición del puente de Gimeno Tomás, donde se instalará una rotonda, la construcción de un puente sobre el barranco del Sigalero a otro nivel y la finalización de la rotonda de Frares.