El informe ha examinado las aguas de Castellón y Valencia, así como las de otras 102 ciudades europeas.
Un estudio realizado por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT) ha revelado que España es uno de los países europeos con mayor presencia de cocaína, MDMA, cannabis y ketamina en aguas residuales. El proyecto ha analizado las aguas residuales de 104 ciudades europeas de 21 países, incluyendo Castellón, Valencia, Barcelona, Tarragona, Lleida, Santiago de Compostela, durante una semana en marzo y abril de 2022.
En total, se examinaron muestras de aguas residuales de aproximadamente 54 millones de personas en busca de rastros de cocaína, anfetamina, metanfetamina, MDMA/éxtasis, ketamina y cannabis. Los resultados han mostrado un aumento continuo de las detecciones de cocaína, una tendencia que se observa desde 2016, a pesar de fluctuaciones durante los confinamientos de 2020 por la pandemia de COVID-19.
En cuanto a la metanfetamina, se ha detectado su presencia en más ciudades. Sin embargo, en el caso de anfetamina, cannabis y MDMA, las detecciones varían considerablemente entre las distintas ciudades, aunque se han encontrado en casi todas las ciudades participantes.
El informe ha concluido que los rastros de drogas eran más elevados en las grandes ciudades que en las localidades más pequeñas en el caso de tres drogas (cocaína, metanfetamina y MDMA), pero no en anfetamina y cannabis. Además, en tres cuartas partes de las ciudades se han detectado residuos más elevados de drogas como cocaína, ketamina y MDMA durante el fin de semana (viernes-lunes), cuando es más habitual su consumo, ya que están asociadas a la ‘diversión’. En cambio, los residuos de las otras tres drogas se distribuyen de forma más uniforme a lo largo de la semana. El director del OEDT ha señalado que este estudio «dibuja un panorama de un problema de drogas tan extendido como complejo».
Mayor presencia de cocaína en los países del sur y de metanfetamina en los del este
Según un informe reciente del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías, se han detectado altos niveles de cocaína en Bélgica, Países Bajos, España y Portugal, así como en la mayoría de las ciudades de Europa del Este, donde se han observado «algunos aumentos». De las 66 ciudades con datos para 2021 y 2022, más de la mitad (38) han registrado aumentos en los residuos de cocaína. Un proyecto europeo sobre aguas residuales también encontró residuos de cocaína crack en sus 13 ciudades europeas, con las cargas más altas en Ámsterdam y Amberes.
En cuanto a la metanfetamina, el informe ha advertido de que esta droga está ahora también presente en Bélgica, el este de Alemania, España, Chipre, Turquía y varios países del norte de Europa, como Dinamarca, Letonia, Lituania, Finlandia y Noruega. De las 60 ciudades con datos para 2021 y 2022, casi dos tercios (39) han notificado un aumento de los residuos.
En el caso de la anfetamina, las cargas más elevadas se registran en ciudades del norte y el este de Europa, como Bélgica, Alemania, Países Bajos, Finlandia y Suecia, mientras que los niveles son mucho más bajos en ciudades del sur. De las 55 ciudades con datos para 2021 y 2022, el panorama ha sido heterogéneo.
En cuanto al MDMA, se ha observado un aumento de las detecciones en 28 ciudades, la mayoría en ciudades del sur y centro de Europa, mientras que en 27 ciudades ha disminuido, principalmente en el norte de Europa. Las mayores cargas masivas de MDMA se han encontrado en las aguas residuales de ciudades de Bélgica, Chequia, Países Bajos, España y Portugal, según el informe.
En el informe se ha incluido por primera vez la ketamina, que se ha detectado en mayor medida en las aguas residuales de ciudades de Dinamarca, Italia, España y Portugal.
Por último, el cannabis es más predominante en ciudades de Europa occidental y meridional, especialmente en Chequia, España, Países Bajos y Portugal. En 2022, se han observado tendencias divergentes: 18 ciudades de 38 notificaron un descenso desde 2021, 15 un aumento y cinco una situación estable.
