Castellón facilita siete nuevas viviendas municipales y trabaja en una bolsa de alquiler social para ayudar a las familias con dificultades

Castellón facilita siete nuevas viviendas municipales y trabaja en una bolsa de alquiler social para ayudar a las familias con dificultades

La Concejalía de Vivienda tiene previsto conceder otros dos pisos que se han quedado sin uso una vez se reformen

La Concejalía de Vivienda del Ayuntamiento de Castellón ha facilitado este año siete viviendas municipales a familias con dificultades económicas y trabaja para incrementar el parque público con una nueva bolsa de alquiler social y un plan de compra.

La concejala de Vivienda, María Jesús Garrido, afirma que el objetivo en esta legislatura es movilizar vivienda vacía en manos de grandes propietarios e incrementar las viviendas públicas “ya que en estos momentos la oferta sigue siendo escasa y las urgencias van creciendo por la crisis por la pandemia”.

Afirma que hay una lista de espera de 288 personas para las viviendas municipales en la Oficina de Vivienda y que este año han dado unos primeros pasos asignando siete viviendas. De esta cifra, cuatro son pisos cedidos al Ayuntamiento por la Conselleria de Vivienda, mientras otros 3 corresponden a viviendas municipales que han quedado sin uso. Asimismo, tiene previsto conceder otros dos pisos que se quedado sin morador una vez sean rehabilitados.

La Concejalía subraya que ahora se encuentran en trámite otras iniciativas con las que se confían a incrementar la oferta de vivienda o alquiler social. Por un lado, espera conseguir siete viviendas en el plan de compra de vivienda pública, que contempla un gasto de 101.000 euros por unidad adquirida. Por otra parte, modifica las bases de la bolsa de alquiler social incluyendo incentivos a los propietarios de 1.500 euros para animar a su cesión. Además, a esta cuantía habrá que sumar la posibilidad de cobrar hasta otros 3.500 euros en caso de desperfectos o impagos.

El departamento de Vivienda también confía en lograr la movilización de vivienda vacía a través del recargo de un 50 % del IBI en pisos desocupados de grandes propietarios. Según el diagnóstico del Plan Estratégico de Vivienda presentado hace dos semanas, la ciudad tiene una necesidad de 4.200 viviendas con protección pública o precios asequibles de la ciudad mientras acumula 13.000 casas vacías.

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