El PPCS reivindica inversión en empresas, autónomos y pymes para evitar la ruina de un territorio “que debe abrir negocios frente a la amenaza de cierres de plantas”
La portavoz provincial del PPCS y secretaria general en el Senado, Salomé Pradas, advierte que los 2.322 contratos indefinidos destruidos llevan a una precarización del trabajo “que hemos evitar a toda costa”
La provincia de Castellón ha visto cómo se destruían 5.000 contratos el pasado diciembre registrando un descenso del 22,49% en materia de contratación según los datos que ha hecho públicos el SEPE (Servicio Público Estatal de Empleo). “Es una cifra dramática que, sobre todo, atenta contra las familias que ven cómo el empleo se precariza y se destruye”. Porque, tal y como ha señalado la portavoz provincial del PPCS y secretaria general en el Senado, Salomé Pradas, de los 5.000 empleos sacrificados, 2.322 eran indefinidos.
“Es un drama que obliga a la izquierda a aplicar políticas útiles y prácticas, las que generan ocupación y no la destruyen”. Al negativo dato de destrucción de empleos (2.322 indefinidos y 2.678 temporales) se suma el de las familias que están afectadas por un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) y que en diciembre sumaban 490 en la provincia de Castellón.
“Son datos especialmente críticos cuando entramos en un enero que, además, está sacudido por una ola de contagios por ómicron explosiva que está afectando gravemente a la hostelería”, señala Pradas.
Resultados duros a nivel provincial que no son mejores a nivel autonómico. De hecho, señala la portavoz provincial del PPCS, Castellón registra una reducción del paro interanual del -16%, 4 puntos por debajo de la media nacional del -20,12%, mientras que a nivel autonómico la Comunitat Valenciana acaba 2021 como el tercer territorio a nivel español por la cola en descenso del paro con un -15,13%.
Desde el Partido Popular, señala Pradas, “vamos a seguir reivindicando las políticas útiles que engrasan la economía y crean ocupación”. “La rebaja de impuestos, los incentivos fiscales, los planes de empleos y cursos dirigidos a dar respuesta a la demanda del mercado laboral, así como la rebaja de los costes energéticos que eviten que sectores, como el cerámico, acaben con su competitividad hundida por la falta de opciones de un Gobierno de España que les ignora”.
