Amparo Marco recalca que entre los objetivos de esta iniciativa, que se desarrollará en el Grao, está el de estudiar la inclusión de criterios de sostenibilidad, justicia social y salud ciudadana en las licitaciones
Castellón se une al reto de lograr una Europa climáticamente neutra de la mano del proyecto DivAirCity, en el que participa desde este mes de septiembre con el Grao como sede junto a otras cuatro urbes europeas: la italiana Orvieto; Potsdam (Alemania); la capital rumana, Bucarest; y Aarhus, en Dinamarca. El objetivo es convertir la diversidad que confluye en las ciudades (entendida como diversidad cultural, social, de género e intergeneracional) en un valor para abordar la emergencia de la contaminación atmosférica y el cambio climático. DivAirCity es un proyecto de cuatro años, financiado por Europa en el marco del programa Horizonte 2020, dentro del alcance de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que valora la diversidad y la inclusión social para lograr una sociedad urbana innovadora, creativa, impulsada por la cultura, verde y neutra en carbono.
Mediante esta iniciativa, las cinco ciudades implicadas, entre las que está Castellón, probarán e implementarán nuevos enfoques urbanos y soluciones basadas en la naturaleza (SBN) para mejorar las condiciones climáticas, sociales y de salud de las personas que las habitan. “Mejorar la calidad del aire en nuestras ciudades mediante la inclusión social y las soluciones basadas en la naturaleza es posible”, avanza la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco. En este sentido, Marco recuerda el nexo que existe entre las personas, lugares, crecimiento económico, etc. y su impacto en la calidad del aire y la descarbonización.
Los diferentes proyectos piloto que dan forma a DivAirCity echan a rodar este mes de septiembre a través de la puesta en marcha de laboratorios urbanos, actividades participativas, el diseño de nuevos modelo de negocio así como de contratos climáticos de ciudades inteligentes que premien la inclusión de procesos de democratización de servicios y tecnologías. En el caso de la capital de La Plana, el epicentro será su distrito marítimo: el Grao. El proyecto piloto castellonense se centrará en la integración de las SBN en las políticas y en la contratación pública innovadora para resolver los desafíos urbanos.
“El objetivo de la ciudad es incluir los criterios de DivAirCity en las licitaciones públicas”, ha reseñado Marco. Así, las intervenciones se enfocarán en la transformación urbana a través de las SBN con la meta de reducir la exposición humana a la contaminación, mejorar la descarbonización y aumentar la justicia social y la inclusión.
Entre las posibles soluciones innovadoras previstas para Castellón se contempla la creación nuevas infraestructuras verdes, el incremento de arbolado en las calles, la realización de actividades de pedagogía de datos para aumentar la concienciación, abogar por la peatonalización de nuevas zonas urbanas para mitigar la contaminación del aire y crear espacios públicos más seguros, participativos e inclusivos, entre otras.