Tanto la gaiata grande 'Llum de Primavera' como la infantil 'Essència Festera' han quedado descalificadas por no cumplir con las bases del concurso.
Las fiestas de la Magdalena 2025 en Castellón han comenzado con una noticia inesperada que ha sacudido al mundo gaiatero: la descalificación de la Gaiata 8, Portal de l’Om, tanto en su versión monumental como infantil, por incumplir las bases del concurso. El motivo, detectado por el jurado técnico durante la tradicional Encesa del lunes 24 de marzo, radica en un fallo en el diseño del escudo de la ciudad, un elemento obligatorio que debe estar presente en cada monumento. Este traspié ha supuesto un duro golpe para la comisión del sector de la plaza Borrull, especialmente significativa por ser la gaiata de la reina infantil de las fiestas, Carla Ibáñez Fabra, y su familia.
Un error en el escudo que marca la diferencia
Según las bases reguladoras del Concurso de Gaiatas 2025, publicadas por el Ayuntamiento de Castelló, el artículo segundo establece claramente que “para que la gaiata sea representativa de las Fiestas de Castelló, deberá figurar en lugar destacado el escudo de la ciudad, el cual tendrá los siguientes elementos básicos: corona, bandera cuatribarrada y castillo”. La bandera cuatribarrada, caracterizada por sus cuatro barras rojas sobre fondo amarillo, es un símbolo histórico de la identidad valenciana y, por ende, de Castellón. Sin embargo, los monumentos presentados por la Gaiata 8, diseñados a partir de un boceto de M. Rodrigo, muestran únicamente tres barras rojas, un detalle que no pasó desapercibido para el jurado.
Tanto la gaiata grande ‘Llum de Primavera’ como la infantil ‘Essència festera’ han quedado descalificadas por no cumplir con las bases del concurso por «un error».
El error fue identificado durante la Encesa, el acto celebrado en la avenida Rey Don Jaime donde las 19 gaiatas de la ciudad iluminan la noche en un espectáculo conjunto que exalta su valor artístico y simbólico. Tras constatar la irregularidad, el jurado técnico informó de inmediato al Patronat Municipal de Festes, organismo encargado de supervisar las fiestas fundacionales de Castellón. La decisión fue tajante: ambos monumentos, el grande y el infantil, quedaban excluidos de la competición, perdiendo así la oportunidad de optar a los premios que se entregarán esta noche, 25 de marzo, en la plaza Mayor a partir de las 21:00 horas.
La descalificación tiene un peso añadido por el vínculo emocional de la comisión con la reina infantil, Carla Ibáñez Fabra, quien en la edición de 2024 fue madrina infantil de esta misma gaiata. Su familia, profundamente integrada en el sector, también forma parte de esta agrupación festera, lo que hace que el fallo resuene con mayor intensidad en el seno de Portal de l’Om.
Las bases del concurso de Gaiatas y los premios en juego
El Concurso de Gaiatas es uno de los pilares de las fiestas de la Magdalena, una celebración que conmemora la fundación de Castellón y en la que los monumentos de luz, conocidos como gaiatas, simbolizan la tradición y el espíritu comunitario de los 19 sectores de la ciudad. Además del “gayato” (el bastón que evoca el traslado de los primeros pobladores desde la montaña al llano) y la iluminación, el escudo municipal es un requisito ineludible que garantiza la representatividad de cada obra.
Es importante señalar que para ser parte del concurso, las gaiatas deben cumplir con varios requisitos. Entre ellos, se exige que incluyan al gayato y la iluminación como elementos esenciales. Además, se establece que no se puede reutilizar más del 20% del monumento del año anterior. En cuanto a las dimensiones, las gaiatas grandes deben tener una altura que oscile entre los 6 y 5 metros, mientras que las infantiles no deben superar los 3 metros.
El fallo del jurado, integrado por expertos técnicos y los 19 representantes de la Gestora de Gaiates, determinará esta noche a los ganadores. El primer premio en la categoría monumental incluye un estandarte acreditativo y una ayuda económica de 5.000 euros, con la posibilidad de ser designada Gaiata de la Ciudad para la Magdalena 2026, lo que añadiría un reconocimiento adicional por parte del Patronat Municipal de Festes. En la categoría infantil, el galardón principal otorga 900 euros y un estandarte, además de la opción de convertirse en la Gaiata Infantil de la Ciudad el próximo año.
Un precedente que invita a la reflexión
La descalificación de la Gaiata 8 no es un hecho aislado en la historia reciente de las fiestas. En 2016, la Gaiata 6, Farola Ravalet, fue excluida del concurso de monumentos grandes por exceder la potencia eléctrica permitida, aunque logró alzarse con el primer premio en la categoría infantil. Estos incidentes subrayan la rigurosidad con la que el jurado aplica las normativas, asegurando que las gaiatas cumplan con los estándares establecidos para preservar la esencia de la tradición.
Para el sector de Portal de l’Om, esta edición de la Magdalena quedará marcada por la decepción, pero también por la oportunidad de aprender y redoblar esfuerzos en el futuro. Mientras tanto, la ciudad se prepara para conocer esta noche a las gaiatas vencedoras, en un acto que promete emociones y el reconocimiento al trabajo de los artistas y comisiones que dan vida a estas esculturas luminosas.
