Si sus demandas no son atendidas, consideran llevar a cabo huelgas generales, de consumo y de alquiler.
La acampada por el derecho a la vivienda y el territorio, y contra la turistificación, ha anunciado su disolución en la plaza del Ayuntamiento de València, como parte de una estrategia para continuar su labor en los barrios. Aseguran que están trabajando en diversas acciones significativas y que están dispuestas a dialogar con otras entidades. Si sus demandas no son atendidas, consideran llevar a cabo huelgas generales, de consumo y de alquiler.
Los integrantes de la acampada comunicaron que han cumplido con los objetivos iniciales. Por un lado, han mantenido las movilizaciones iniciadas por el movimiento València no està en venda, ampliando la visibilidad de sus reivindicaciones. Por otro lado, han fortalecido el movimiento popular y comunitario, destacando su actividad.
La acampada comenzó el 19 de octubre tras una gran manifestación bajo el lema «València s’ofega». Durante su tiempo en la plaza, han organizado más de diez conciertos, asambleas y charlas políticas, que han atraído a miles de participantes, además de otras actividades culturales y de convivencia.
Han señalado la creación de varios grupos de trabajo, que han sido fundamentales para su organización, gracias al apoyo solidario del tejido vecinal y de múltiples colectivos. También han destacado que han fortalecido la red popular y asamblearia, conectando a la comunidad con diversos movimientos sociales, y planean crear nuevos espacios en barrios y pueblos donde aún no los hay.
A nivel de la ciudad, han anunciado que continuarán con nuevas movilizaciones y ocuparán espacios públicos. Subrayaron que han demostrado que las redes populares son capaces de llevar el conflicto hasta el Ayuntamiento.
Con la firme declaración de que no se conformarán solo con la plaza, afirmaron: «Si no tenemos casa, lo queremos todo y lo lucharemos todo». Además, establecieron una cuenta atrás a partir del 27 de octubre, advirtiendo que si no hay cambios significativos para la primavera, volverán a llenar las calles y ocuparán la ciudad. También instaron a estar atentos a futuras movilizaciones y expresaron su preocupación por las obras del puerto, que consideran un desafío a sus demandas.
Fotografía portada: X @acampadavlc