El hombre presentaba una restricción total de su autonomía.
La Guardia Civil de Valencia ha detenido en Bétera a un hombre por maltratar a su padre de ochenta años, que era completamente dependiente, a quien según parece sometía desde hacía años a humillaciones, golpes e insultos y que vivía en una casa que no contaba con las condiciones básicas de habitabilidad, sin baño ni cocina, y estaba llena de heces, conforme ha informado el Instituto Armado.
Esta situación, conforme los vecinos, llevaba años produciéndose, si bien no había sido denunciada frente a las autoridades policiales por temor y falta de pruebas. No obstante, a principios de diciembre, uno de los vecinos pudo grabar con su móvil de qué manera el hijo «insultaba, humillaba e inclusive propinaba múltiples bofetones a su padre de ochenta años de edad, que yacía tendido en el suelo sin poder defenderse y semidesnudo«.
Los Guardias Civiles, al tener conocimiento de estos hechos, comenzaron las oportunas gestiones para poner punto y final a este maltrato y se dio cuenta a los Servicios Sociales de la localidad, quienes, en compañía del equipo técnico del Centro de Salud de Bétera, formado por Médico, Enfermera y Trabajadora Social, efectuaron una primera intervención para valorar la situación del anciano.
El hombre presentaba una restricción total de su autonomía ya que padecía artrosis, ansiedad, incontinencia urinaria y de deposiciones y un deterioro cognitivo esencial.
CASA INHABITABLE
Por todo ello, se acordó la emergencia de ser ingresado en un centro, pues su hijo no se encarga de sus cuidados y la casa no reunía las condiciones de habitabilidad precisas al no tener ni baño ni de cocina y se hallaba llena de heces, tanto animales como humanas.
Por todo ello, los agentes detuvieron al hijo de la víctima, un hombre de 51 años y de nacionalidad de España, a quien se le atribuye un delito de malos tratos en el ámbito familiar. Además de esto, los agentes tuvieron conocimiento de que exactamente la misma mañana de la detención, el autor de los hechos se trasladó al Centro de Salud de Bétera para informarse sobre la posibilidad de internar a su padre y proseguir cobrando la pensión.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número cuatro de Llíria.