El detenido se hacía pasar por un menor de edad en las redes sociales, cuando en realidad tenía 41 años.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Gijón a un individuo que se dedicaba al «grooming», una forma de acoso en la que manipulaba psicológicamente a niñas de entre nueve y 17 años, una de ellas en Castellón.
El arrestado utilizaba perfiles falsos en redes sociales para hacerse pasar por un menor de edad y ganarse la confianza de las niñas. Una vez establecido el contacto, manipulaba a las víctimas hasta lograr que le enviaran imágenes de contenido sexual.
La investigación se inició a raíz de una denuncia presentada por una madre en Algeciras, en la que informaba que su hija de 12 años estaba siendo víctima de un individuo que la manipuló a través de las redes sociales y consiguió que le enviara imágenes sexuales degradantes. La influencia del agresor sobre la menor era tan fuerte que esta desarrolló una dependencia psicológica.
Dos días después, otra madre presentó una denuncia similar en Castellón. En este caso, la niña, también de 12 años, estaba tan manipulada que no solo había enviado imágenes sexuales de sí misma, sino también de su hermana de nueve años.
Durante la investigación, se descubrió que el detenido iniciaba su estrategia haciéndose pasar por un menor y, a medida que ganaba el control sobre las niñas, revelaba su verdadera edad y situación. Su objetivo era establecer un contacto físico con ellas en el futuro. Además, utilizaba órdenes y comentarios obscenos para obligar a sus víctimas a seguir sus instrucciones.
La investigación se centró en los perfiles de redes sociales del individuo, lo que permitió identificarlo como un hombre de 41 años residente en Gijón, casado y con un hijo. Se pudo determinar que en 2014 había agredido sexualmente a una menor de 14 años a la que conoció mientras paseaba a su hijo por los jardines de su urbanización. Fue condenado a dos años de cárcel, pero la pena estaba suspendida.
Gracias a la colaboración de especialistas en ciberdelincuencia de la Policía Nacional, se llevó a cabo la detención del sospechoso. Se realizaron registros en los dos domicilios que ocupaba en un mismo edificio, donde se encontró una gran cantidad de material informático. El análisis de este material proporcionó pruebas suficientes para identificar al individuo como el autor de los hechos, ya que utilizaba el mismo teléfono para acosar a las niñas y tenía configuradas varias cuentas de redes sociales.
Después de analizar el material intervenido, se descubrió que había acosado a otras seis menores, todas ellas con edades comprendidas entre los 12 y los 17 años. Los agentes lograron localizar a estas víctimas y tomarles declaración.
Este caso pone de manifiesto la importancia de la colaboración entre las autoridades y los especialistas en ciberdelincuencia para combatir el grooming y proteger a los menores de este tipo de abusos en línea. La detención de este individuo ha permitido poner fin a su actividad delictiva y proporcionar apoyo a las víctimas afectadas.
