A principios de año se iniciaron investigaciones por parte de los agentes, debido a la sospecha de que una pareja y su hijo estuvieran adquiriendo, manipulando y vendiendo cocaína al menudeo mediante el 'telecoca' en Algemesí y en localidades cercanas.
Tres personas de una misma familia, dos hombres y una mujer, han sido detenidas por agentes de la Policía Nacional en Algemesí (Valencia) por presuntamente vender cocaína utilizando el método de ‘telecoca’ tanto en la localidad como en otros municipios cercanos. Según se ha informado, los detenidos utilizaban el vehículo rotulado de la empresa en la que uno de ellos tenía un puesto de responsabilidad para desplazarse.
Se realizó una entrada y registro en dos viviendas que pertenecían al sospechoso, los agentes incautaron 17 gramos de cocaína, distribuidos en 22 dosis, así como 420 euros en efectivo, una báscula de precisión, dos armas cortas de fuego real, dos armas de aire comprimido y una gran cantidad de munición. Las fuerzas y cuerpos de seguridad han dado a conocer estos detalles a través de un comunicado.
Los agentes encargados de la investigación descubrieron que el padre de familia se encargaba de suministrar la droga principalmente durante su horario laboral, utilizando para ello el vehículo rotulado de la empresa en la que trabajaba. Se desplazaba a cualquier lugar donde los compradores lo emplazaban previamente por teléfono, evitando levantar sospechas y complicando el trabajo de los investigadores.
Después de llevar a cabo varios dispositivos de vigilancia, los agentes interceptaron al sospechoso cuando se dirigía a su trabajo en el vehículo de la empresa, y encontraron varias dosis de cocaína en el interior de la palanca de cambios.
Como resultado de estos hechos, los agentes detuvieron al sospechoso y a su pareja, ambos españoles de 49 y 55 años respectivamente, en uno de los domicilios, como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública y blanqueo de capitales. También se detuvo al hijo de la pareja, de 28 años, como presunto autor de los delitos de pertenencia a grupo criminal y contra la salud pública.
De los detenidos, ninguno tenía antecedentes policiales. Uno de ellos ha pasado a disposición judicial, mientras que los otros dos fueron puestos en libertad después de prestar declaración, aunque se les advirtió de la obligación de comparecer ante la autoridad judicial si fueran requeridos para ello.
