El objetivo de los manifestantes era criticar la gestión de la catástrofe y exigir la dimisión de Mazón.
El Gobierno de la Generalitat Valenciana ha expresado su pesar por lo que considera un «uso partidista del dolor» durante la tercera manifestación celebrada este domingo en València. En la protesta, organizada para criticar la gestión de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) y exigir la dimisión del president de la Generalitat, Carlos Mazón, sectores de la «izquierda, la extrema izquierda y el separatismo catalán» fueron señalados como responsables de este uso, según las palabras de la vicepresidenta primera, consellera de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda y portavoz del Consell, Susana Camarero.
En una rueda de prensa posterior al pleno del Consell, presidido por Camarero ante la ausencia de Mazón por problemas de salud, la vicepresidenta se refirió a la manifestación que, convocada por entidades cívicas, sociales y sindicales, reunió a unas 80.000 personas, según la Delegación del Gobierno, por el centro de la ciudad de València. El objetivo de los manifestantes era criticar la gestión de la catástrofe y exigir la dimisión de Mazón.
Camarero afirmó que, aunque respetan y comprenden el dolor de las personas afectadas, «de forma pacífica» y con el objetivo de «canalizar su dolor, su malestar y reclamar que las ayudas lleguen con la celeridad que necesitan», lamentan profundamente que, además de los afectados, «se haya utilizado el dolor por parte de la izquierda, la extrema izquierda e incluso de entidades del separatismo catalán», aludiendo a las esteladas y cánticos que se vieron en la manifestación.
«Uso partidista del dolor»
La vicepresidenta insistió en que se trata de un «uso partidista del dolor», con el objetivo de «sacar rédito electoral» del sufrimiento de los valencianos, que han perdido seres queridos, viviendas, comercios y empresas debido a la catástrofe. «Es lamentable la utilización partidista del dolor de la gente, este intento de apropiarse del dolor», destacó Camarero.
En este sentido, la vicepresidenta recordó las actitudes de los partidos de la izquierda en la Comunitat Valenciana, mencionando específicamente su comportamiento en Les Corts, los medios de comunicación, las manifestaciones y las mociones de censura presentadas en Requena y Chiva. Camarero aseveró que la moción en Chiva «no se presentó para ir más rápido en la recuperación de municipios, sino que la primera decisión que adoptó el nuevo equipo de gobierno sirvió para subirse el sueldo».
Ante la pregunta sobre las declaraciones de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, respecto a la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a València, Camarero mostró su desacuerdo, calificando de «curiosa forma» la actitud del presidente del Ejecutivo. «El huidizo Sánchez escapó de Valencia el día 3 de noviembre. Salió huyendo de Paiporta y no tuvo tiempo para venir a acompañar a las víctimas en el funeral» de la Catedral de València, comentó Camarero.
La vicepresidenta también comparó las visitas del presidente con las realizadas por los reyes, quienes, según ella, han estado presentes en cinco ocasiones para mostrar su apoyo y empatía a los afectados. «Pedro Sánchez tiene otras prioridades, como irse a esquiar a Cerler en lugar de visitar a los afectados en Valencia,» concluyó Camarero, subrayando que el Gobierno valenciano sigue trabajando «sin descanso» para apoyar a los afectados por la DANA.